El martes por la mañana los docentes que ingresaron a la Escuela Técnica Nº 547 “Héroes de Malvinas” encontraron el taller de carpintería destrozado. Por ello, la comunidad educativa, docentes y alumnos realizaron un abrazo solidario a la escuela y anunciaron el cese de actividades durante este miércoles.

Según lo relatado por las autoridades, la escuela nuevamente sufrió un robo de materiales didácticos, herramientas, rotura de infraestructura, etc.  Sumado a los hechos que suceden a diario, como robos permanentes a los alumnos, docentes o bicicletas dentro de la institución.

Ante este lamentable y repetitivo contexto, la comunidad educativa, directivos, docentes, asistentes y administrativos resolvieron suspender todo tipo de actividad escolar hasta tanto las autoridades ministeriales “brinden las herramientas necesarias que garanticen seguridad para poder seguir trabajando con normalidad”.

Amsafe Rosario se sumó y respaldó a la convocatoria realizada en la zona sudoeste de la ciudad.

“Tuvimos que parar, por el día de hoy, las clases porque la mayoría de los docentes de taller y de teoría estamos colaborando en el fortalecimiento de todo lo que es cerramiento que dé al exterior de la escuela para prevenir el posible ingreso de extraños”, enfatizó Roxana maestra del establecimiento ubicado en Av. Provincias Unidad al 3300.

Según lo que informan las cámaras, ingresaron a la 1 de la mañana del pasado lunes. “Entraron desde el patio trasero, levantaron y barretearon una reja que es bastante importante, que da al taller de carpintería. Una vez que ingresaron, rompieron los vidrios y se llevaron herramientas. Hay un armario que le doblaron las puertas, lo barretearon. A unas máquinas que hay grandes, que son de carpintería, les sacaron el motor, los cables; algunas cosas se las llevaron, otras las dejaron todas rotas”, exclamó.

La docente reconoció que entre las personas de integran la comunidad educativa existen dos grandes grupos. “Por un lado está la gente que se hace carne de la situación, que te comprende y que lucha. Hay muchos padres y madres que ahora están acá, pero también hay gente que es indiferente”.

Las respuestas luego de los reiterados robos no fueron las esperadas. “Nos instan a poner más alarmas, en realidad eso significa que el cuerpo directivo tenga que estar alerta las 24 horas del día, los 7 días de la semana. La verdad que no es vida para los directivos tener que estar monitoreando la escuela las 24 horas del día. Insistimos en que no basta con poner alarmas, necesitamos una salida integral. Pudiendo pensar en el afuera de la escuela, no solamente en el adentro, que quede registrado en una cámara o en una grabación. Acá las respuestas tienen que estar y las soluciones tienen que estar afuera”, concluyó la docente.