Trabajadores dependientes de la Dirección Provincial de Niñez realizaron esta mañana una asamblea frente a Desarrollo Social contra el fin del vaciamiento financiero y la precarización laboral.

“Exigimos al ministro de Economía, Walter Agosto y al ministro de Desarrollo Social, Danilo Capitani, que revean los presupuestos en el sector para que dejen de hacer recortes salariales y existan verdaderas políticas de empleabilidad permanente”, señalaron.

> Te puede interesar: Perotti: «Si en 17 de 19 departamentos se dictan clases es porque queremos que las escuelas funcionen»

“Son muchas las demandas, pero fundamentalmente pedimos el pase a planta. En estos momentos lo que nos prometen son contratos de 30 mil o 35 mil pesos para no profesionales y profesionales respectivamente, para los cuales hay que descontarles el pago del monotributo, y nos queda un sueldo muy por debajo de la canasta básica”, se quejó en diálogo con Conclusión Daniela López, una de las afectadas y agregó: “Desde hace años aguantamos falsas promesas y estamos cansados, queremos el pase a planta como única solución”.

Por su parte Juan Albano, recordó que se trata de una “situación histórica” y aseguró que la precarización en el sector “es muy grande”. “Más de la mitad de los trabajadores que estamos en alojamientos residenciales, en acomapañamiento hospitalario, trabajo administrativo, estamos precarizados”, ejemplificó.

Como consecuencia, dijo que por un lado no se pueden generar políticas de calidad para los niños vulnerables y por otro lado, la inestabilidad lleva a que las denuncias y los informes que se hacen “no tengan un sustento y pierdan la validez que deberían tener, por el miedo que tenemos de quedarnos sin trabajo”.

“Cada vez son más las promesas pero menos los cumplimientos, lo cual satura”, disparó Albano y siguió: “Desde el comienzo de la pandemia que estamos trabajando, no paramos en ningún momento, hoy en día no tenemos garantizado un calendario de vacunación ni tampoco una estabilidad permanente para el sector”.

En ese sentido, expresó que son profesionales que “día a día ponen el cuerpo y no se nos garantiza ningún tipo de derecho”.

Uno de los puntos fundamentales del reclamo es el pase a planta en lugar del los contratos que ofrecen a la baja. “La canasta básica, según el Indec, es de 93 mil pesos, y nos ofrecen un contrato de máximo de 35 mil pesos para algunas funciones mientras otras siguen en la precarización total”, apuntó.

“Le estamos pidiendo al ministro de Economía y de Desarrollo Social que amplíen los presupuestos no solo para los salarios sino también para dotar de recursos al sector”, dijo a modo de cierre y concluyó: “Vamos a estar haciendo medidas de fuerza escalonadas porque ya no podemos bancar más. Ya hicimos los informes administrativos, los reclamos a quien corresponde, pero las respuestas no aparecen”.