En el marco del conflicto desatado en la aceitera Ricedal Alimentos de Chabás, tras los despidos de 28 operarios, el Ministerio de Trabajo de la provincia de Santa Fe, prorrogó la conciliación obligatoria por otros 15 días por no encontrar la solución esperada a este conflicto.

La empresa aceitera ratifico en la reunión realizada ayer por la tarde en la sede rosario del organismo, su postura de no acatar la conciliación obligatoria, pese a ser advertida de que tal actitud derivara en severas sanciones.

En declaraciones al diario La Capital, el delegado gremial, Pablo Lucero, destacó que «lejos de cerrar la fábrica lo que quieren es desmantelar el sindicato para restar fuerzas a los trabajadores e imponer condiciones sin respetar derechos laborales, nuestro objetivo es mantener las fuentes de trabajo».

Los despedidos mantienen su acampe frente a el establecimiento, ubicado en la ruta nacional 33.