La medida de fuerza programada para este martes 30 de marzo por la Asociación de Trabajadores de la Sanidad de Rosario y el sur provincial (Atsa Rosario) fue suspendida por el dictado de conciliación obligatoria por parte del Ministerio de Trabajo provincial.

La protesta de los trabajadores de la sanidad fue originada por la “insistente negativa de la parte empresaria de otorgar “un aumento para todos los que día a día están en el frente de batalla, máxime en esta pandemia mundial llamada Covid-19”, según expresó el secretario general de Atsa Rosario, Marcelo Liparelli.

“Acatamos la conciliación obligatoria pero resaltamos la verdadera convicción que lo condujo a tomar esa medida para salvaguardar los intereses económicos de todos los trabajadores nucleados en Asa Rosario”, agregó el dirigente gremial.

Más adelante, Liparelli agregó: “Estamos convencidos y exhortamos a todos los actores que en forma directa o indirecta tienen que darnos una respuesta a nuestro justo reclamo para una urgente recomposición salarial”.

“Nuestro salario no se mide por un índice inflacionario que en último año ha sufrido una perdida adquisitiva importantísima, sino que se tiene que medir por los precios desmedidos que aumentó la canasta familiar”.

Enseguida, continuó: “Nuestros salarios se miden por los precios de alquileres, transporte urbano, precios de escuelas, útiles, en definitiva todo lo que en este año ha aumentado por encima del 50%.”.

Por último el representante de los trabajadores del sector indicó: “El Consejo Directivo de nuestro gremio quiere dejar en claro que seguiremos bregando por sus derechos y beneficios y que nadie nos va a cambiar en nuestro camino de convicciones gremiales y sociales”.