El segundo plenario virtual de secretarios generales de los gremios agrupados en la Federación Sindical de Trabajadores Municipales (Festram) de Santa Fe aprobó hoy la realización de medidas de fuerza para la semana próxima «en día y modalidad a determinar», en demanda de «una actualización salarial».

Los dirigentes sindicales exigieron «urgentes respuestas» en relación con «el aumento de las asignaciones familiares y el pago de un bono» para los trabajadores de la actividad, que fueron considerados «esenciales».

Los secretarios generales facultaron a los referentes paritarios a disponer «la modalidad y fecha del inicio del plan de lucha si no hay soluciones positivas».

Los dirigentes coincidieron de forma unánime en que «no hay más espacio para aguardar una actualización de haberes, ya retrasados seis meses, porque perdieron el 13,6 por ciento en relación con el Indice de Precios al Consumidor (IPC) y el 17,2 por ciento comparados con el valor de la canasta alimentaria».

Un documento gremial firmado por el titular de la Festram, Claudio Leoni, sostuvo que los intendentes «tomaron un crédito de más de 800 millones de pesos a partir del ahorro generado por la caída de los salarios municipales».

«Los trabajadores realizaron un gran esfuerzo económico para sostener el funcionamiento de los servicios públicos esenciales en el contexto de la permanente lucha contra la Covid-19 y la epidemia de dengue”, aseveró.

«Existe elevada responsabilidad de los jefes comunales y de las Aseguradoras de Riesgos del Trabajo (ART) sobre las condiciones de seguridad. Los municipales sufren un alto deterioro de sus ingresos familiares. A ello se suman casos de contagios en el sector como consecuencia de esas tareas esenciales», remarcó.

Leoni explicó que el salario de bolsillo promedio apenas supera en un 2 por ciento el valor de la canasta básica total de junio último, por lo que «la mitad del personal está por debajo de la línea de pobreza», y explicó que quienes cobran el haber mínimo garantizado y son sostén de una familia tipo tienen un ingreso de 30.500 pesos frente a una canasta básica de 43.811 pesos.

«A todo ello se suma que en muchas comunas provinciales no se cobró el bono de 3 mil pesos, y que las autoridades pagan a personal informal salarios inferiores al Ingreso Familiar de Emergencia (IFE), sin obra social ni aportes», concluyó.