Más de cien trabajadores de la central nuclear Atucha -ubicada en la localidad de Lima, partido de Zárate- fueron suspendidos el pasado viernes por la paralización de obras que se realizaban en el reactor CAREM.

La situación preocupa al sector debido a que existe la posibilidad de que éstos empleados sean despedidos en un futuro cercano.

Los trabajadores suspendidos son empleados de la contratista Tecna (filial de la española Isolux Corsán), encargada de la construcción del Balance de Planta y de las instalaciones y equipos necesarios para la generación de energía eléctrica.

Según trascendió, la empresa decidió suspender a los trabajadores y no pagarles sus salarios para renegociar los contratos establecidos con precios anteriores a la devaluación y al aumento inflacionario.

El secretario General de la Uocra seccional Zárate, Julio González, dijo ante los medios que «la suspensión tiene que ver, según nos comunicó la empresa Tecna, con el corte de la cadena de pago y la no reactualización de los valores debido a que la empresa lleva adelante la ejecución de la obra que fue cotizada con valores del 2016 y a la fecha no ha logrado reactualizar esos valores».

Además, indicó que la responsabilidad de solucionar esta problemática es de la Comisión Nacional de Energía Atómica.