Los choferes de colectivos del interior del país realizarán el próximo martes una «retención de tareas» que afectará el servicio en «distintos municipios y provincias» pero no en Capital y Gran Buenos Aires, informó hoy la Unión Tranviarios Automotor (UTA).

El secretario del Interior de la UTA, Jorge Kiener, sostuvo que la medida de fuerza tiene como objetivo lograr una «urgente recomposición salarial».

«Hemos intervenido con una constante voluntad de diálogo y racionalidad en la discusión salarial, sumado al compromiso con el funcionamiento del servicio público que operamos, sin desatender la importancia de una necesaria y urgente recomposición salarial para todos los trabajadores del sector», sostuvo el dirigente.

Además, consideró que «resulta indispensable arribar a un acuerdo salarial que permita recomponer el poder adquisitivo, que ya se ha desvalorizado por el efecto de la inflación. El acuerdo de 2018 venció en marzo pasado».

«En atención a ello, y ante la postura de la representación empresaria, que desoye la legítima pretensión sindical de una recomposición salarial para todos los trabajadores del transporte automotor de pasajeros del interior del país, ratificamos el plan de lucha, declarando el estado de alerta y resolvemos la retención de tareas a partir del martes 4 de junio a las 00», señaló Kiener.