La CGT denunció que el Gobierno no está cumpliendo con el envío de los fondos para las obras sociales e indicó que los responsables de la demora son la jefatura de Gabinete y al Ministerio de Producción.

La cúpula de la CGT y el gobierno habían alcanzado un acuerdo que preveía una serie de pasos, el primero de ellos era la publicación del decreto que restituye $13 mil millones al fondo especial que financia los tratamientos médicos más costosos.

También se debía avanzar en la creación legislativa de una Agencia Nacional de Tecnologías de la Salud y, a cambio, el sindicalismo debía apoyar el trámite legislativo del blanqueo laboral.

La primera parte del acuerdo se concretó el 8 de abril, cuando el presidente Mauricio Macri firmó un decreto que destinaba $13.000 millones para las obras sociales.

Sin embargo, los gremios denunciaron que las autoridades políticas no cumplieron su palabra e identificaron a la jefatura de Gabinete y al Ministerio de Producción como los responsables de bloquear los fondos.

Por su parte, el oficialismo indicó que la cúpula de la CGT se ausentó del Senado para el tratamiento del proyecto de ley de blanqueo laboral y no cumplió su parte del acuerdo.

Voces autorizadas señalaron que si no se liberan los fondos, se abre una posibilidad de que los gremios anuncien un paro.

Para que los fondos lleguen a las obras sociales sindicales, hace falta una resolución de la Superintendencia de Servicios de Salud que conduce Sebastián Neuspiller.

Quien concentra la gestión de la relación con el mundo sindical es el titular de Producción, Dante Sica, pero también en esta área tiene una fuerte injerencia la Jefatura de Gabinete.