La Asociación Bancaria (AB) repudió «enérgicamente» el decreto de necesidad y urgencia (DNU) anunciado anoche por cadena nacional por el presidente Javier Milei y consideró que la norma «avasalla y golpea a la democracia y las instituciones».

En un comunicado difundido este jueves y firmado por el secretario general, Sergio Palazzo, el gremio se declara en estado de «alerta y movilización» y rechaza asimismo que «el Banco Nación y los bancos públicos en general, sean convertidos en una Sociedad Anónima para su posterior venta o liquidación, como si se tratara de un negocio más».

«Hay una función social que nunca debe resignarse y es la razón de ser de este tipo de instituciones», remarcaron en el texto, en el que rechazaron y repudiaron «enérgicamente» el DNU publicado hoy en el Boletín Oficial.

Los bancarios recordaron asimismo que la iniciativa fue anunciada en coincidencia con el 22 aniversario del estallido social del 2001.

«Arranca el presidente diciendo que es un día histórico… Un día como hoy pero tristemente histórico, fue cuando en el 2001 hubo una salvaje represión que terminó con la vida de varios ciudadanos, que reclamaban justamente por sus derechos y marcaba el fin de un gobierno que se iba en helicóptero con un país en llamas», dice el comunicado.

Y agrega: «Hace 22 años de ese lamentable episodio y como una nefasta coincidencia del destino y cierto grado de cinismo, en esta misma fecha se anuncia este DNU, con un sinnúmero de derogaciones de leyes, plagiando lo sucedido en aquella época (incluso casualmente con muchos de sus protagonistas) y agravado por un montón de monstruosidades, incluso desde el punto de vista legal».

En tanto, la AB consideró que «no hay necesidad ni urgencia para esta batería de medidas, que van claramente en perjuicio y detrimento del pueblo argentino y sus trabajadores/as y nadie más» y agregó: «Todavía nos seguimos preguntando en qué momento pasamos a ser casta y la casta real pasó a ser un mero espectador de este siniestro espectáculo».

Para el gremio, el DNU «representa un retroceso en la historia argentina, décadas que creíamos olvidadas, se avasalla y golpea a la democracia, a las instituciones, solo genera dolor y sufrimiento en el pueblo e incluso en la gente que esperanzada votó por este espacio».

Finalmente, se declararon en «estado de alerta y movilización, en defensa de las y los trabajadores y el pueblo en su conjunto».

«Nos veremos en las calles, no estamos dispuestos a aceptar este brutal y salvaje ajuste, ¡¡¡ni tampoco a resignar ningún derecho!!!», concluye el texto.