La Asociación de Empleados de Despachantes de Aduana (AEDA) comenzó este miércoles un paro por tiempo indeterminado en terminales del Puerto de Buenos Aires ante la falta de acuerdo en la negociación paritaria con el sector empresario.
La organización que conduce Rául Vázquez inició medidas de fuerza con cortes totales en los accesos a Terminal Río de La Plata (TRP) y APM Terminals (Terminal 4) del puerto porteño, consignó la agencia de noticias Mundo Gremial.
“Si no hay solución, la medida no se va a levantar”, anticipó Vázquez, titular de la AEDA, quien responsabilizó a los integrantes del Centro de Despachantes de Aduana (CDA) y a la cámara empresaria del sector como los “verdaderos responsables” del conflicto.
El gremio se encuentra desde hace meses en negociación con el CDA por el tercer cuatrimestre de la paritaria en curso. Los empresarios ofrecieron un aumento del 34 % que recibió el rotundo rechazo por parte de los trabajadores.
Después de numerosas audiencias en el ministerio de Trabajo, las partes no lograron arribar a un acuerdo a pesar de las constantes propuestas presentadas por la conducción sindical al mando de Vázquez, que denunció una posición «intransigente» del CDA.
El secretario general de la AEDA encabezó este martes una movilización a la sede de la cámara empresaria para exigir una propuesta salarial que dé respuesta al requerimiento de los trabajadores.
En su discurso en las puertas del CDA, Vázquez apuntó contra la conducción del Centro y los delegados paritarios del sector empresarios que “no toman responsabilidad y minimizaron el conflicto”.
“Nos estamos pidiendo nada de otro mundo, hoy los salarios están por debajo de la línea de la pobreza. Ya llevamos 4 meses de conflicto y esto no puede seguir así”, señaló el dirigente gremial.
La actividad nuclea a unos 9.000 empleados de despachantes de aduana, que hasta el momento percibieron un 58 % de incremento de sueldos en lo que va de la paritaria. Hoy el salario inicial del sector es de 81.000 pesos brutos.
En ese marco, la cartera laboral a cargo de Raquel “Kelly” Olmos aún no tomó cartas en el asunto para dar resolución final a un conflicto que promete escalar con fuertes complicaciones en el comercio exterior, lo que podría producir caídas de magnitud en el ingreso de dólares al país.
