La Asociación Empleados de Comercio (AEC) de Rosario se movilizó este viernes hacia las puertas de la empresa Garbarino, ubicada en la peatonal Córdoba al 1.200, para reclamar la grave situación por la que están atravesando más de 50 trabajadores.

El cuadro se replica en todo el país, afecta a unos 4.000 empleados de la firma que tiene 4 locales en la ciudad donde los trabajadores exigieron el pago de una parte del sueldo de abril y la totalidad del de mayo.

En tal sentido, el secretario gremial de Empleados de Comercio, Juan Gómez expuso: “Nosotros denunciamos como gremio un lockout patronal, que es lo que está ocurriendo, y hay pruebas importantísimas de vaciamiento que está haciendo la empresa”.

“Un ejemplo concreto – prosiguió Gómez – es que no han repuesto mercadería, le cortaron las líneas telefónicas, no tienen posnet” y añadió que “lo más grave es que no hay nadie que les diga cuando le van a pagar el sueldo o reactivar los locales”.

Más adelante, el dirigente gremial apuntó: “Como gremio seguimos exigiendo la intervención del Estado, tanto el provincial como el nacional, a través de sus Ministerios de Trabajo para resolver este problema”.

A su turno, uno de los vendedores de la empresa, Cristian Portocarrero, indicó: «La situación es la misma que planteamos anteriormente, no nos están pagando los sueldos desde hace dos meses y los aportes desde hace un año y medio aproximadamente y nos deben también un bono de fin de año».

«No hay ningún tipo de comunicación de la empresa con nosotros,  y ayer (por este jueves) estábamos en asamblea y ellos volvieron a cerrar las sucursales sin ningún tipo de información y hasta el día de hoy seguimos en la misma situación» añadió el trabajador.

Finalmente, Portocarrero señaló que «esto venía un poco antes de la pandemia y se intensificó con la venta de la empresa que desde que se vendió fue cada vez peor hasta llegar a la situación de estos últimos meses que ya directamente es desastroso porque no se abona absolutamente nada».

AEC Rosario ya viene denunciando esta situación a través de varias presentaciones en el Ministerio de Trabajo de Santa Fe, y rechazando los argumentos de los propietarios de Garbarino «que aducen falsamente que la empresa pasa por un período negativo en cuanto a las ventas».