Por Aldo Battisacco

El paro del 9 de junio ha perdido la fuerza inicial luego de los acuerdos logrados por algunas organizaciones, sin embargo aún resta que lleguen a un acuerdo otros gremios que reclaman recomposiciones  salariales superiores al 30%.

El mensaje que dio el Gobierno con la firma de las paritarias de cinco sindicatos de los más representativos de la actividad económica nacional, fue indiciario de los objetivos que se había propuesto de antemano. La Unión Obrera Metalúrgica (Uom), la Unión Personal Civil de la Nación (Upcn), el sindicato de Empleados de Comercio, la Unión Obrera de la Construcción (Uocra, y el sindicato de Unico de Trabajadores de Edificios de Renta y Horizontal (Suterh) rubricaron acuerdos que rondaron el 27%.

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El ministro de Trabajo, Carlos Tomada había manifestado sobre la inflación que «según todas las consultoras no va a superar el 24 o el 26 por ciento este año», y agregó que «lo razonable» es «imaginar una evolución de salarios que mantenga la capacidad adquisitiva, sin por eso establecer un techo».

Las declaraciones deslizadas el 10 de abril por el titular de la UIA, Héctor Méndez,  que propuso que las mejoras salariales no superen el 20% y que iban a «sacar corriendo a los que vengan con un plantel de aumento de 43%» sensibilizaron al Gobierno. Las afirmaciones de Antonio Caló, que: “Los techos de las paritarias los pusieron los empresarios” que fueron ratificadas posteriormente por Armando Cavallieri, líder de los mercantiles, configuraron un escenario atravesado por la desesperación del Gobierno, la voracidad empresaria y la urgencia los trabajadores que arrastraban un menoscabo de su sueldo desfazados por la inflación.

El pedido de «paritarias libres» por parte de los sindicatos del transporte (CATT) conducidos por Juan Carlos Schmid y la CGT de Moyano se suceden hasta estos días. Una fuerte señal de las últimas semanas, fue el derrotero seguido por las organizaciones que radicalizaron sus reclamos. Por caso, aceiteros, que llegó al 36% con complementos no remunerativos. La dureza de las medidas de fuerza que paralizaron las terminales de granos de los puertos de todo el país, dejó en claro el resultado obtenido en la utilización de una herramienta como la protesta, cuando están ajenas a los posicionamientos partidarios como lo reflejo el secretario general de la Federación que los nuclea, Daniel Yofra.

Los trabajadores eran conscientes de lo que representaba su negociación. El esquema que abordaron fue «triparitario» el Gobierno dejó de ser árbitro para convertirse en una parte más -cartera de Economía mediante- y con la suficiente capacidad de veto sobre los acuerdos logrados.

«Con la huelga logramos el objetivo, no solo de arrancar el aumento salarial a las patronales, sino también el de destrabar el acuerdo y garantizar la vigencia de paritarias libres por parte del Ministerio de Trabajo, Empleo y Seguridad Social de la Nación», manifestaron los aceiteros al cierre de sus paritarias, a pesar de la denuncias anteriores.

Bancarios - Protesta                    Salvador

Por su lado, los bancarios sostienen que el acuerdo logrado “posibilita una real recuperación del poder adquisitivo del salario, e incorpora para la totalidad de los bancos representados una metodología de ‘compensación por la participación en las ganancias globales del sistema financiero, tomando como referencia el ROE promedio publicado por el Banco Central», que se pagará mensualmente en una doceava parte de los valores establecidos en una tabla que reconoce cuatro segmentos salariales.

La Federación Gremial del Personal de la Industria de la Carne cerró una recomposición salarial del 32% anual en dos tramos con la Cámara de Empresas Procesadoras Avícolas (CEPA), para las labores de servicios avícolas, derivados y subproductos.

A su vez, la Federación Obrera Nacional de la Industria del Vestido y Afines (FONiva) acordó la novación del acuerdo salarial con directivos de la Federación Argentina de la Industria de la Indumentaria (Faii), que establece una recomposición salarial anual en los sueldos del 30,5% para los trabajadores de esa industria.

Otro de los acuerdos que movió el amperímetro fue la negociación entre el Gobierno porteño y los trabajadores del subterráneo que acordaron un aumento salarial del 32%.

En tanto, en el orden regional, la CGT San Lorenzo había anticipado su demanda de reclamar una recomposición de 42 por ciento, pero la negativa del empresariado del complejo oleaginoso ( industrial de aplicación exclusiva del COPA) ocasionó la resolución de un paro y la inmediata intervención de la cartera de Trabajo que dictó la conciliación obligatoria.

La semana se presentó complicada con la renuncia de Edgardo Quiroga a la conducción de la CGT, así, las negociaciones por el Salario Mínimo Regional (COPA) quedaron sin representación. De allí la aparición del presidente de la Cooperativa de Trabajos Portuarios, Herme Juárez, quien desmanteló la posibilidad de un reclamo de recomposición que se dio hasta ahora. El hombre es proclive a aceptar el 27% en las negociaciones en sintonía con la propuesta empresarial.

Cabe recordar que las empresas del sector oleaginoso son las de mayor facturación. Así lo habían hecho saber los aceiteros: “las empresas tienen un costo laboral que va del 0,5% al 1,8 por ciento. Es una rentabilidad muy alta. Cargill en 2013 facturó $26.000 millones, Dreyfus $19.000 millones, mientras que Molinos Río de la Plata, una empresa local, $21.000 millones. El aumento que pedimos llegará a $1.500 millones de pesos, mientras que las empresas van a facturar $250.000 millones este año. Las empresas pueden pagar lo que pedimos y mucho más también”.

En Rosario, la Asociación del Personal de la Junta Nacional de Granos (APJng) acordó en negociación con la concesionaria Servicios Portuarios una recomposición salarial en las paritarias del sector del 38 por ciento, que se pagara en dos tramos. El primero será de un 30 por ciento en abril y el segundo tramo en julio. De esta manera, el salario inicial será de 13 mil pesos.

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Y el Sindicato Unidos Portuarios Argentinos (Supa), conducido por César Aybar,  firmó por el 27,5% de recomposición salarial y un bono para navidad de 3100 pesos que se pagará los primeros días de diciembre. Lo que permitió que “el sueldo básico de la categoría mas baja sea de 22000 pesos, la segunda categoría en 24000 pesos y la tercera en 30000 pesos”.

Resta aún avanzar con las negociaciones de la Unión Tranviario Automotor (UTA), Camioneros, docentes universitarios y Unión Trabajadores de Prensa de Buenos Aires.

El secretario general de la Unión Tranviarios Automotor (UTA) en el orden nacional, Roberto Fernández, advirtió hoy que a los colectiveros “no les alcanza” un aumento salarial del 27%, y acusó al Gobierno de “hablar de paritarias libres, pero después te hacen pito catalán”. Los choferes hace 5 meses que vienen hablando de salarios.

‘Si Kicillof no quiere paritarias, que saque un decreto’ dijo Barrionuevo de Kicillof, el gastronómico va por un 30%.

Los principales dirigentes de las centrales opositoras y de la Confederacion Argentina de Trabajadores del Transporte, ratificaron su decisión de llevar adelante el paro del 9 de junio. Los cambios instrumentados en el Impuesto a las Ganancias fueron insuficientes según analizaron los gremialistas, quienes además consideran exiguas las recomposiciones salariales acordadas hasta el momento.

Pero también, cabe esperar la táctica de cada organización,  para arrancar mayores concesiones a sus empleadores atendiendo la rentabilidad de las empresas de cada sector, y de como será necesario que el ministerio de Trabajo extreme la creatividad para mediar resolviendo las negociaciones que se avecinan.

Habrá que preguntarse si la concepción que utiliza la política de ingresos como herramienta para moderar el proceso de estabilización, y no como componente central, redunda en beneficio de quien. También, un programa tendiente a reducir la inflación se asienta en una política monetaria y fiscal consistente con ese objetivo.