Empleados de Unilever y miembros del Sindicato de jaboneros de Rosario se manifestaron este lunes por la mañana en el Ministerio de Trabajo, en el marco de la conciliación obligatoria por los 65 despedidos de la planta de Villa Gobernador Gálvez.

Aguardando por una solución definitiva, y con la esperanza de que se haga efectiva la reincorporación de los 65 empleados, varios gremios de la ciudad se concentraron frente a las puertas de la cartera laboral de la provincia.

Conclusión dialogó con Andrés Quisama, secretario adjunto del Sindicato de jaboneros de Rosario, quien se refirió a la situación de los empleados de la planta de Villa Gobernador Gálvez. “Esperamos que el Ministerio tenga un gesto positivo para con el gremio y que se empiece a solucionar este problema que es muy grave”, indicó.

A partir de la conciliación obligatoria mantenemos la esperanza de que se pueda hacer efectiva la reincorporación de los trabajadores”, continuó Quisada.

Además, afirmó que “la empresa no ha cambiado la postura y sigue ratificando los despidos. Continúan pensando que el costo más alto es el del trabajador. Unilever no ha perdido volumen de ventas, ya que el jabón se sigue vendiendo bien. No hay un argumento fehaciente que justifique los despidos”.

Varios gremios locales se acercaron a la manifestación para comprometerse con la causa. Entre ellos, Empleados de Comercio, La Bancaria, Luz y Fuerza, Judiciales, Correos, UOM y Sitratel, entre otros. Sobre el apoyo de los sindicatos, Quisama sostuvo: “Estamos muy agradecidos a todos los compañeros por estar acá. Tenemos que estar todos juntos en este momento, porque se viene un ajuste muy fuerte a nivel nacional”.

 

Juan Gómez, secretario gremial del Sindicato Empleados de Comercio, indicó: «Estamos hablando de 65 despidos de una multinacional que recauda millones de dólares. Lo que están haciendo es nada más ni nada menos que despedir a trabajadores con antigüedad para después, a través de contratos basura, hacer ingresar a trabajadores precarizados. Estamos acá acompañando a los trabajadores como siempre lo hemos hecho«.

Por su parte, el secretario general de Luz y Fuerza, y a su vez titular del Movimiento Sindical Rosarino, Alberto Botto, dio su punto de vista sobre el conflicto y sostuvo que: «tenemos que estar unidos para rechazar este tipo de medidas porque nos van a conducir a una crisis terminal«.

«Siempre el hilo se corta por lo más delgado. Estamos preocupados porque esto no está ocurriendo sólo en Unilever. Se esperan más de 100 despidos en Vasalli. Las economías regionales se ven deterioradas con este tipo de políticas. Lo que venimos anunciando desde el Movimiento Sindical Rosarino desde el primer semestre de 2016, se viene cumpliendo tal cual lo denunciamos en su momento«, concluyó.