Después del dictado de la conciliación obligatoria por parte del Ministerio de Trabajo de la Nación y acatada por el gremio de la alimentación, la Federación nacional de los trabajadores del sector postergó el paro que había decidido en todas las empresas alimentarias y que consistía en realizar medidas de fuerza de dos horas por turno.

A la espera de la audiencia que se realizará el próximo lunes para destrabar el conflicto, el secretario general del gremio de la alimentación de Rosario, Miguel Vivas, expuso: “Estamos en un cuarto intermedio hasta el lunes, además tenemos dictada la conciliación obligatoria, o sea que  por ahora , esperamos hasta la nueva reunión con las empresas en el ministerio de trabajo”.

Este sector tuvo en el mes de julio un aumento un 6 % no remunerativo y un 0,5% para septiembre; con el compromiso de volver a discutir el salario a mediados de este último mes mencionado.

Por lo pronto, el gremio sigue en estado de alerta y movilización y en tal sentido, el sindicalista agregó: “No hay mucho optimismo, pero siempre tenemos la fe que los empresarios razonen”.

“Nuestros trabajadores fueron esenciales desde el primer minuto de la pandemia”, agregó el dirigente gremial quien completó: “Venimos asumiendo mayores costos y riesgos de contagio sin que las patronales reconozcan este esfuerzo y nieguen la necesidad del aumento salarial”.