Empresarios, gremialistas y representantes de provincias petroleras retomarán mañana las negociaciones con el Gobierno nacional, tras pasar a un cuarto intermedio la semana pasada, en medio de la crisis internacional del precio del crudo.

Luego de mantener diferentes reuniones para avanzar respecto de una solución a la crisis y sostener los puestos de trabajo, este lunes, según lo pautado, debería haber una propuesta formal por partes de empresarios y el Gobierno.

El gobernador de Chubut, Mario Das Neves, y el intendente de Comodoro Rivadavia, Carlos Linares, junto con los empresarios se mostraron optimistas respecto de los resultados de la última reunión en Casa Rosada.

Sin embargo, Das Neves, ya anticipó que si el Gobierno no da respuesta a los reclamos de los petroleros hablará «con todos los bloques» del Congreso nacional para lograr «un fondo de contingencia».

«Siempre en el marco de las instituciones, vamos a ir a fijar un fondo de contingencia y vamos a hablar con todos los bloques».

«Nosotros queremos ganar tiempo y darle, fundamentalmente, tranquilidad a los trabajadores», alertó el mandatario provincial.

Por su parte, el secretario general del Sindicato del Petróleo y Gas Privado del Chubut, Jorge Ávila, criticó que «aún no hay soluciones».

«Queremos igualdad de trato respecto de las otras provincias. No se entiende por qué en Neuquén un barril vale 67,50 dolares y en Chubut sale 54,90. No hay una explicación lógica», subrayó el sindicalista.

Apuntó que en la actualidad no ve la posibilidad de «suspender las paritarias», aunque aclaró que lo pone «en discusión».

«Muchos preguntan ´¿qué van a poner los trabajadores?´ Las paritarias, no hay otra cosa que podamos poner. Hoy por hoy no firmo un convenio de suspensión de negociaciones salariales. Lo podría hacer si están todos los puestos de los trabajadores y después de hacerlo con los trabajadores», puntualizó.

Así, se quejó de que la provincia «aportó 30 mil millones de pesos en los últimos diez años y 8.600 millones de dólares por la exportación», mientras fustigó: «Ahora nadie quiere ayudarnos porque quieren dejar el libre mercado».