Desde la Asociación Gremial de Docentes e Investigadores de la UNR (Coad), difundieron los resultados de la encuesta docente que se denominó: «Balance y prospectiva sobre nuestro trabajo en el contexto de pandemia», llevada adelante a mediados de agosto y los números son preocupantes.

La encuesta fue respondida por casi 900 docentes activos y jubilados de la UNR y arrojó que el 88,9% de los encuestados afirma afrontar una sobrecarga de tareas laborales.

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En tanto, un 70,9% expresa una superposición entre las tareas de cuidado y las actividades laborales y también un 70,9% comparte los recursos tecnológicos para actividades remotas con una o más personas.

Otros datos de la encuesta demuestran que la gran mayoría de los encuestados (75,8%) manifestó que sufre o sufrió, producto de la situación de trabajo remoto, problemas físicos (sobre todo problemas posturales, musculares y en la vista) y/o psíquicos (agobio, ansiedad, dificultades con el sueño o descanso).

Además, la gran mayoría ha tenido que realizar algún tipo de inversión en tecnología y equipamiento para llevar adelante las tareas laborales.

Así las cosas, desde el gremio universitario señalaron que “para visibilizar nuestras problemáticas, se destaca la elección en la mayoría de los encuestados por la realización de campañas virtuales, articulación de jornadas con los estudiantes e implementación de apagones virtuales”, expresó Federico Gayoso, secretario general de Coad.

Exámenes remotos

Otra de los datos que arrojó la encuesta fue sobre los exámenes remotos. Allí un 76,5 % de docentes expresó que estaría de acuerdo con la acreditación de conocimientos a través de exámenes remotos.

Y en relación a este tema, aparecen “algunos problemas”, debido a que las unidades académicas que cuentan con un protocolo para la toma de exámenes remotos, -según los encuestados- manifiesta diversos problemas como la no provisión por parte de la institución de las herramientas necesarias para llevar adelante la tarea; la ampliación de la jornada laboral que implicaría realizar un examen con esa reglamentación; la no pertinencia para el trabajo docente de algunas de las acciones que el protocolo exige.