Carpa contra los descuentos y en defensa de la salud pública frente a Gobernación. Este jueves Siprus realiza una jornada de protesta para exigir ser recibidos por el gobernador Omar Perotti, tras “los descuentos masivos y discriminatorios a los profesionales de la salud que realizaron protestas en octubre, paradójicamente, en reclamo de salarios y condiciones dignas de labor”.
En ese marco, desde las 10 instalaron una carpa frente a Gobernación en unidad con ATE Rosario y estarán durante todo el día, con la realización de distintas actividades para culminar a las 18.30 con el acto central.
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“Pedimos al gobernador que nos reciba en persona porque ya son 18 meses que no hemos tenido ninguna conversación con nadie del Ejecutivo, es increíble, es la única provincia en la que ha sucedido eso”, se quejó el presidente de Siprus, Diego Ainsuaín en diálogo con Conclusión.
Explicando el reclamo, señaló que “la provincia lejos de reconocer el rol que hemos desempeñado en la pandemia, nos aplicó una quita de entre 10 mil y 25 mil pesos que reclamábamos por condiciones dignas, contra la precarización laboral”.
“Están tratando de amedrentarnos, pero no van a lograrlo porque está en juego mucho más que nuestra dignidad sino lo que pasará de aquí en adelante con los hospitales”, enfatizó y agregó: “Es inentendible lo que hizo la provincia, parece que salud y educación no son prioridad. Es un maltrato que no merecemos”.
Por último, consideró que “el que tiene que tomar cartas en el asunto es el gobernador porque cerca de 3 mil trabajadores de la salud se vieron perjudicados con este descuento”.
Castigar a los trabajadores de la salud resulta inaceptable desde cualquier punto de vista.
En tanto, Lorena Almirón referente de ATE dijo a Conclusión que “exigimos la inmediata devolución de los días descontados. Tres días de paro que hemos realizado en octubre por reclamos salariales y condiciones dignas de trabajo”.
“Este gobierno que se dice popular está descontando a trabajadores esenciales, tanto de salud como de educación, compañeros que hemos puesto el cuerpo ante la pandemia y la única respuesta por parte del Gobierno fue el descuento”, manifestó indignada.
Asimismo, expresó que tras aplicar el descuento “nuestro salario que ya era un salario de pobreza, dejándonos con este recorte bajo la línea de indigencia”.
“Nos parece una vergüenza, somos desechables para el Gobierno. Encima nos descontaron en diciembre y no en noviembre, porque eran las elecciones. Es una violencia económica que repercutió fuertemente en nuestra economía familiar”, destacó y siguió: “Esto es un castigo, un amedrentamiento y llamado de atención para decir que los que no están de acuerdo con las políticas del Gobierno son castigados”.
Finalmente aseguró que hasta no obtener una respuesta seguirán en las carpas. “Vamos a pasar la noche y estaremos hasta el otro día, hasta que tengamos respuestas”, cerró.
