La inflación que se viene sintiendo desde el último tiempo y sus consecuencias en la suba de precios tiene repercusiones en todos los rubros y el impacto y los aumentos se hacen sentir en el bolsillo de la gente. Así, desde el gremio mercantil decidieron tomar medidas al respecto.
Desde el Centro Unión Empleados de Comercio de la localidad de Avellaneda, en el norte de la provincia de Santa Fe, se sumaron al control de precios en los supermercados presentando un informe detallado de la suba que sufrieron muchos productos durante este mes respecto al mismo período de 2015.
En el informe se puede ver que hay artículos que aumentaron hasta un 70 por ciento, otros 50 y otros 40, como por el ejemplo el kilo de chorizos que de 50 pesos pasó a 88; la harina pasó de 14 a 20 pesos y el pollo de 19 a 25 pesos, entre otros.
En ese marco, Conclusión consultó a Héctor Cucit, uno de los referentes del sector mercantil de Avellaneda, quien señaló que «hace seis años que realizamos estos informes debido a la inflación que hay, gobierne quien gobierne nosotros controlamos porque son los empleados de comercio lo más vulnerables por la inflación».
«Un trabajador que cobra 20.000 pesos puede hacer frente a los aumentos y acomodarse pero uno que cobra 10.000 pesos por mes, con la inflación que hay, no llega a fines de febrero, ni hablar al mes de marzo«, ejemplificó Cucit.
Además aseguró que «si actualmente estamos en una inflación del 30 por ciento, sin dudas vamos a superar ese porcentaje» y dijo que «estamos realmente muy mal con la inflación». En ese sentido, anticipó que previo a las paritarias del sector, pedirán al gobierno nacional una suma fija no remunerativa de entre 2.500 y 3.000 pesos para palear la inflación.
«Es una emergencia y tiene carácter de urgencia para los meses de febrero y marzo -previo a paritarias de abril- porque los trabajadores no llegan a fin de mes», señaló Cucit y agregó: «El gobierno ayudó al campo y me parece bien, ayudó a la agroindustria y está bien, pero tiene que tomar medidas y ocuparse de esta otra pata -inflación- que afecta a todos los trabajadores de manera inmediata».
