Trabajadores y trabajadoras nucleados en ATE Rosario realizaron un abrazo a la escuela Nº 251, ubicada en Génova 5449, para pedir los servicios esenciales como gas, agua, luz y espacios para brindar el derecho a la educación en pandemia a los estudiantes de la zona noroeste de la ciudad de forma salubre y respetando los protocolos.

Desde ATE denuncian que «el estado del establecimiento de barrio Empalme Graneros es calamitoso». Porque no cuenta con las necesidades básicas para el dictado de clases a 18 burbujas de 12 alumnos cada una, y aclaran que un total de 216 estudiantes, más el personal docente y asistentes escolares que acuden a la escuela día a día, lo hacen sin condiciones elementales.

Por otra parte señalan que «los baños no cuentan con desagües, como tampoco con puertas, ni depósitos de agua. Les docentes no tienen baño propio, ya que fue destinado para el uso de toda la comunidad escolar. Un baño para todos los varones y otro para todas las mujeres», se quejaron.

En el mismo sentido, explicaron que «el establecimiento ubicó 5 y 6 burbujas bajo el mismo tinglado y hay aulas sin luz, mientras el sistema eléctrico está intervenido para contar con servicio mínimo en algunas áreas, pero representa un riesgo de importancia. Pese a las pésimas condiciones y de los recurrentes hechos de vandalismo, les trabajadores llevan adelante todos los días el dictado de clases a los dos establecimientos que funcionan en el mismo edificio».

 

Desde el sindicato estatal plantearon: «Queremos escuelas salubres, dignas y seguras. Queremos trabajar sin poner en riesgo nuestra vida. Nos cuidamos defendiendo nuestros derechos».