Las Fuerzas de Defensa llevaron a cabo un “ataque preciso basado en información de inteligencia en la zona de Beirut”. Suhail Hussein Husseini era el responsable principal en las transferencias de armas entre Irán y su organización.
Las fuerzas israelíes indicaron que 15 personas murieron en los bombardeos, mientras que la Yihad Islámica habló de cuatro muertos, entre ellos uno de sus líderes y una niña.
Según fuentes talibanas, la explosión se produjo «durante la oración del viernes dentro de una mezquita en el distrito de Spin Ghar». Por el momento, ningún grupo reivindicó el atentado. Entre los heridos está el imán del templo.
El comunicado a través del cual lo informaron expone que “los esfuerzos de Egipto permitieron llegar a un cese el fuego entre la resistencia y el enemigo sionista”. Además, remarca que “lo respetará mientras el enemigo sionista lo haga”.
El ataque se perpetó contra un puesto de observación del movimiento yihadista en el sur de la Franja de Gaza. Estas muertes se suman a las más de 200 ocurridas días atrás en el marco del traslado de le embajada de EE.UU a Jerusalén.
