El mandatario ucraniano insistió: «Creo que Putin no quiere la paz. Pero eso no significa que no quiera sentarse a la mesa de negociaciones con ninguno de los líderes. Para él se trata de romper el aislamiento político. Para él es beneficioso. Sentarse, hablar, y no negociar».
Los bombardeos tuvieron entre otros blancos, un centro comercial, un polideportivo y edificios residenciales en la segunda ciudad más grande de Ucrania, con algo más de 1,4 millones de habitantes.
«Decidí sustituir al comandante de la Fuerza Aérea para reforzar la cúpula militar de Ucrania”, declaró el mandatario, en un video publicado en Telegram, tras la publicación del decreto de destitución del comandante Oleshchuk.
El presidente Javier Milei participó este sábado de la Cumbre Global por la Paz de Ucrania, y, en un breve discurso, manifestó: “No hay prosperidad económica sin comercio libre, y no hay comercio libre si no hay paz. El comercio libre naturalmente pacífica”.
El Ministerio del Interior ruso señaló que la orden contra el presidente ucraniano es en virtud a un artículo del Código Penal de Rusia.
