Diferentes organizaciones de distintos sectores también participarán de la actividad para «visibilizar la crisis de las Universidades públicas y de la ciencia».
La Universidad de Buenos Aires pidió ser auditada, pero rechazó que la tarea recaiga en la Sindicatura General de la Nación, ya que entienden que este organismo depende directamente del presidente y no tiene la facultad de controlar el presupuesto universitario. Desde el Gobierno lanzaron fuertes críticas.
La Asociación del Personal de la UBA señaló que “La UBA está de luto” debido a la “bochornosa jornada en la que pusieron n juego el futuro de todo un país”. Desde el Frente Sindical de Universidades Nacionales subrayó que “la voluntad popular ha sido defraudada”.
El exmnistro de Educación de la Nación, sostiene que «hay que llegar a una solución donde los docentes y no docentes universitarios tengan un aumento digno sin erosionar el equilibro fiscal».
El presidente del gremio que los agrupa, Eduardo Marostica, cuestionó las medidas del Gobierno nacional, en cuanto al aumento de subsidios al transporte público del AMBA y a la extensión del presupuesto de la UBA porque “buscan romper y generar diferencias y malestar”.
