El sindicalista era acusado de integrar, junto con la barrabrava, una asociación ilícita que se encargaba de la reventa de entradas. Sin embargo, la jueza no encontró pruebas de su participación.
El espacio perteneciente al conocido lugar de reunión de muchas organizaciones gremiales y sociales, llevará el nombre del histórico sindicalista metalúrgico fallecido días atrás.
La justicia consideró que no había riesgo de fuga ni de entorpecimiento en la investigación del caso, por lo que no había motivos para que el sindicalista portuario continúe detenido.
Así lo expresó el dirigente sindical en declaraciones radiales, en donde también apuntó que «al que le falta el plato de comida es al trabajador», mientras que «al dirigente no le falta» y «por eso no se preocupa demasiado».
«Si quiere que me meta preso, si quiere usar uno de los servicios que siempre utiliza que lo utilice y me haga matar, pero no vamos a dar un paso atrás ni a perjudicar a los trabajadores», advirtió el jefe del gremio de los camioneros, luego de que el presidente le haya dedicado palabras en su discurso de hoy.
