Hubo cortes de carreteras y líneas ferroviarias, e incluso enfrentamientos de grupos separatistas con policías que homenajeaban a sus colegas actuantes en la violenta jornada de 2017. Miradas disidentes al interior del movimiento que pide la autonomía.
Los habitantes de Avdiïvka, ciudad industrial controlada por las fuerzas de Kiev, no tienen electricidad y el agua corriente se corta regularmente. La calefacción es además esporádica, con la temperatura que cae a -12ºC.
El país europeo denunció el supuesto financiamiento de la insurrección armada de los prorrusos en el este ucraniano, donde ya murieron casi 10 mil personas.
Una tragedia irreparable ocurrió en la mina de Zasiadko, al este del país. El conflicto interno entre fuerzas de ese país y los separatistas prorrusos dejó más de 6.000 muertos en diez meses.