Días atrás en la capital de la soja una escuela fue fumigada mientras se dictaban clases, por otro lado, un productor agrícola ganadero no dudó en sostener que habría que fusilar a la vicepresidenta y sus hijos. La opulencia de un sector que sigue exigiendo una Argentina para pocos, sigue jugando políticamente utilizando sus rancias herramientas.
La causa ya tiene a cinco procesados por infringir los límites fijados para las fumigaciones en los barrios Villa Alicia, La Guarida y Luar Kayard. Una noticia que invita a creer en un imprescindible cambio de paradigma en la manera de producir. Un fallo judicial que interpela los privilegios del agronegocio.
La Sala II Cámara Federal de Casación Penal, con asiento en la Capital Federal, rechazó la apelación del Municipio, confirmando las distancias de protección de las fumigaciones con agrotóxicos de 1095 metros (terrestres) y 3000 metros (aéreas) respecto a la planta urbana del lugar.
Quien incumple es el intendente, Javier Martínez, al no hacer lugar a una medida cautelar a favor de las familias. “Hay tres barrios comprendidos con esta medida que son Villa Alicia, La Guarida y Luard Kayad, el agua de red que consumen las personas afectadas de la zona tiene 18 tipos agrotóxicos”, relató Sabrina Ortíz, abogada querellante.
Se trata de Fernando Esteban Cortese, quién ya se encuentra procesado por la justicia debido a su actividad contaminante. El padre y el sobrino de Sabrina Ortíz, quién denunciara con anterioridad a esta persona, se vieron involucrados en una situación sumamente preocupante.
