El vocero del Consejo de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, John Kirby, aseguró que su país autorizó el uso de ATACMS por parte del Ejército ucraniano, tras los ataques registrados la semana pasada.
El viceministro de Relaciones Exteriores, Sergei Ryabkov, subrayó que aquellos lugares en los que detecten la aparición de armas nucleares tácticas norteamericanas, no están excluidas como objetivos potenciales en caso de un conflicto militar.
Para el Licenciado en Economía, Alejandro Marcó del Pont, «la guerra en Ucrania ha contribuido a desestabilizar aún más las cadenas de suministro, que, aunque representan solo una parte de las importaciones de las principales naciones, son esenciales para muchas industrias cruciales».
Ni las autoridades ni la prensa habían informado sobre la existencia del Oréshnik, capaz de burlar cualquier escudo antimisiles occidental, según el presidente Vladímir Putin.
Según el comunicado de la Fuerza Aérea ucraniana, el misil intercontinental fue lanzado desde la región rusa de Astracán. Es la primera vez que Moscú dispara este tipo de arma que hace aumentar la preocupación por una escalada en la intensidad del conflicto.
