Alrededor de 500 policías y militares reprimieron a trabajadores portuarios que se sumaron a la desobediencia civil. La del sábado es la jornada más sangrienta desde que comenzaron las protestas que exigen el restablecimiento del Gobierno de Aung San Suu Kyi en la antigua Birmania.
Los militares que tomaron el poder en Myanmar publicaron una lista con los activistas más famosos del país, a quienes buscan por promover las protestas, y advirtieron que aquellos que los alberguen “se enfrentarán a medidas de acuerdo con la ley”.
Las movilizaciones se llevaron a cabo en Moscú y varios puntos del gigante euroasiático y tuvieron como principal reclamo la liberación del líder opositor, Alexei Navalny, quien fue detenido la semana pasada al regresar a Rusia tras haberse recuperado en Alemania de un envenenamiento.
El cuestionado proyecto de ley propone multa o prisión de un año a quienes difundan imágenes u otros elementos que permitan identificar a policías en el cumplimiento de sus funciones con el fin de “atentar contra su integridad física o mental”.
En redes sociales, ciudadanos denunciaron que las fuerzas de seguridad lanzaron químicos desde tanques, provocando quemaduras en la piel de los manifestantes.
La violencia estalló después de que la policía matara el lunes a un hombre de 27 años identificado como Walter Wallace Jr., que sufría de problemas de salud mental según su familia.
La protesta se enmarca en un paro general que cumplen hoy los trabajadores de la salud nucleados en la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE) y en la Asociación de Licenciados de Enfermería (ALE) de la Ciudad de Buenos Aires.
Las fuerzas de seguridad reprimieron con gases lacrimógenos a los manifestantes. El movimiento de los chalecos amarillos surgió a fines de 2018 en rechazo a los planes del Gobierno del presidente, Emmanuel Macron, de aumentar los precios del combustible.
El funcionario estadounidense Mike Pompeo alertó que su país analiza sancionar a las autoridades bielorrusas por la represión y la violación de Derechos Humanos durante las protestas que exigen nuevas elecciones.
Así lo afirmó el concejal del Frente de Todos, Eduardo Toniolli, en relación a la violenta detención de un feriante el pasado sábado en la zona del Parque España. El edil señaló que la Guardia Urbana no tiene potestad para realizar ese tipo de procedimiento y adelantó un pedido de informes.
Desde la muerte de Floyd, el 25 de mayo, la de este sábado fue la mayor movilización. En tanto, la policía reprimió algunas de estas manifestaciones en las ciudades de Portland y Seattle.
Los trabajadores del frigorífico Penta fueron reprimidos y heridos con balas de goma por las fuerzas policiales bonaerenses cuando reclamaban la reincorporación de 240 despedidos, la reapertura de la fábrica y el pago de salarios. En tanto, los efectivos que participaron de la represión fueron desafectados.