El jefe del Gobierno del país eurocentrista, Olaf Scholz, señaló que su país "está mostrando de manera clara y creíble que está dispuesta a asumir una responsabilidad de primer plano en la seguridad” del continente.
Sin embargo, los combates y los bombardeos continúan sin pausa en el este y sur de Ucrania, donde Rusia controla ya parcial o totalmente cinco provincias ucranianas, territorios que dado señales de querer conservar.
Tras partir de una base de la Fuerza Aérea de Malasia, no quedó claro hacia dónde se dirigía aunque los tres mayores diarios de Taiwán afirmaron que era esperada esta misma noche en la isla autónoma tras su paso por Malasia pese a las advertencias de China.
Pidió ante el Parlamento que los partidos que forman parte del Gobierno estén dispuestos a "reconstruir un nuevo pacto de confianza, sincero y concreto" con “un apoyo convencido”, al tiempo que los llamó a “reconstruir” un espíritu de unidad nacional”.
Rusia, Turquía e Irán son actores principales en la guerra que asola al país presidido por Basharal Assad. La cumbre será encabezada por el presidente iraní, Ebrahim Raisi, mientras que Putin y Erdogan se verán por primera vez desde la invasión rusa a Ucrania.
El anuncio del viaje llega un día después de que Estados Unidos advirtiera que Irán podría suministrar a Rusia drones militares para su ofensiva en Ucrania, en medio de creciente hostilidad entre Washington y Moscú por el conflicto.
El titular de la organización atlántica, Jens Stoltenberg, dijo al respecto: "Con 32 naciones alrededor de la mesa, seremos aún más fuertes y nuestra gente estará aún más segura, mientras enfrentamos la mayor crisis de seguridad en décadas".
La vocera de la Oficina de Asuntos de Taiwan, Zhu Fenglian, dijo que Jens Stoltenberg envió un mensaje erróneo al afirmar que “China está amenazando a Taiwán”. Afirmó que la nación insular es parte de China y que “los taiwaneses son sus hermanos y hermanas”.
La organización atlántica consideró que el gigante asiático “emplea una amplia gama de herramientas políticas, económicas y militares para aumentar su presencia global y proyectar poder, al tiempo que mantiene la opacidad sobre su estrategia, sus intenciones y su acumulación militar".
En el primer día de deliberaciones, el secretario general de la organización atlántica, Jens Stoltenberg, dijo que Rusia es una "amenaza directa" para todos los aliados y que el mundo enfrenta la mayor crisis de seguridad desde la Segunda Guerra Mundial.
El Ministerio de Defensa ruso aseguró que se utilizaron misiles de “alta precisión” destinados a las armas occidentales. Por este ataque, Volodimir Zelenski pidió que Rusia sea reconocida como “Estado patrocinador del terrorismo”.
El vocero del Kremlin, Dmitri Peskov afirmó categórico: “El pago en divisas se realizó ya en mayo y el hecho de que los fondos no hayan sido entregados a los beneficiarios no es nuestro problema".