Los repelentes varían entre $3.000 y $9.800, según el tipo y la marca, mientras que los protectores solares factor 30 o 40 cuestan cerca de $23.000 si son nacionales, y alrededor de $50.000 si son importados.
“Estimamos que las personas que consumen medicamentos no están renovándolos y esperan a terminar los que tienen en sus casas antes de comprar de nuevo”, señaló el integrante del Colegio de Farmacéuticos, Leonardo Jurado, quien además dijo que no hay demasiadas buenas noticias para el sector: la venta de barbijos y antigripales se mantiene estable, mientras que la de alcohol en gel está en “franca decadencia”.
Piden acelerar la autorización para fabricar los propios en las farmacias.
La idea es que ese precio se mantenga fijo durante todo el verano, pero desde el sector no quieren darlo por hecho debido a la incertidumbre económica que atraviesa el país.
El alza deriva de la falta de renovación del acuerdo que mantenía el gobierno nacional con los diferentes actores del sector para que las subas no superen el índice inflacionario.
