El ejercicio tenía como fin comprobar la capacidad de combate real del sistema, su precisión y su funcionamiento en maniobras inesperadas.
El Ejército surcoreano detectó el lanzamiento e "incrementó la vigilancia en estrecha colaboración con Estados Unidos". El país norteamericano y Corea del Sur aseguran que el líder norcoreano y Putin tienen un pacto de cambio de armas norcoreanas por asesoramiento ruso en tecnología de satélites.
A diferencia de los misiles balísticos, el test de misiles de crucero no está prohibido bajo el régimen de sanciones aplicado por Naciones Unidas sobre Corea del Norte.
El mandatario norcoreano, Kim Jong-un amenazó con una guerra abierta si su país vecino del sur viola al menos “0,001 milímetros” de su territorio. Su par Yoon Suk-yeol dijo que una provocación del Norte recibirá una réplica “multiplicada”.
Si bien descartó que no iniciará una guerra “unilateralmente”, el líder de Corea del Norte dijo que si el país limítrofe intenta utilizar armas que amenacen su soberanía, no dudarán en aniquilarlos usando todos los medios, inclusive la fuerza de sus propias manos.
Las relaciones entre las dos Coreas están en un momento de tensión no visto en décadas, después de que el líder norcoreano, Kim Jong-un, inscribiera en la Constitución la vocación del país como potencia nuclear, y probara varios misiles balísticos intercontinentales.
Kim Jong-un aseguró que “la situación militar en la península coreana se volvió “extrema” debido a las confrontaciones “sin precedentes” de Washington. Dijo que 2023 fue un “año de gran cambio” en el que su país logró “victorias reveladoras”.
Los comentarios del líder a las Fuerzas Armadas de su país llegaron tras un encuentro que mantuvieron la semana pasada entre Corea del Sur y Estados Unidos en Washington, donde se discutió la disuasión nuclear en caso de un conflicto con el Norte.
El periplo de Kim por la región rusa de Extremo Oriente mostró las posibilidades de cooperación militar entre Corea del Norte y Rusia, sujetas a sanciones internacionales por el programa armamentístico norcoreano y la invasión rusa de Ucrania, respectivamente.
Kim Jong-un invitó a Vladimir Putin a visitar Corea del Norte cuando sea conveniente. Tras aceptar la propuesta reafirmó su voluntad “de avanzar con la historia y tradición de la amistad Rusia-Corea del Norte”.
Kim Jong-un subrayó que notan la sinceridad de sus “amigos los rusos” desde el mismo momento que llegaron a Rusia y que las conversaciones ayudarán a “elevar las relaciones hasta un nuevo nivel”.
Kim Jong-un salió el domingo de Pyongyang acompañado por una importante comitiva de oficiales militares, según las imágenes difundidas por la prensa oficial del primer viaje al extranjero del líder norcoreano desde 2019.