Los ataques también dejaron heridas a unas 60 personas y 15 más están desaparecidas. Los edificios atacados albergaban a decenas de civiles desplazados, en su mayoría niños y mujeres.
Más de 34.600 palestinos han muerto, 29 de ellos en las últimas 24 horas, y más de 77.000 han resultado heridos en el asalto israelí, según el Ministerio de Salud de Gaza. Los bombardeos han devastado gran parte del enclave costero y provocado una crisis humanitaria.
