"La elefanta, de 25 años, llevaba muerta 10 días cuando llegamos. La autopsia demuestra que sus órganos digestivos se volvieron negros, lo que en general indica que hubo envenenamiento, según los médicos", explicaron especialistas.
Decenas de miles de habitantes atemorizados huyeron de sus casas en las inmediaciones del volcán Agung, uniéndose a los turistas desamparados en la búsqueda de un lugar donde dormir.
El volcán comenzó a expulsar lava a más de 3.000 metros de altura después de estar lanzando cenizas y algo de lava desde el sábado. “La lava sigue llenando el cráter y cuando rebose comenzará a deslizarse por la ladera. Hay posibilidades de una erupción mayor", advirtieron.
Científicos señalaron que su su reducido número lo convierte en uno de los simios más amenazados de extinción en el planeta.
Más de 75.000 personas tuvieron que ser trasladadas a refugios temporarios. "La probabilidad de una erupción es bastante fuerte, pero no es posible predecir cuándo sucederá", declaró un portavoz de la agencia de gestión de catástrofes naturales.
El fotógrafo David Slater le ganó un juicio a la organización Peta luego de que un macaco accionara la cámara del reportero gráfico a modo de selfie cuando ésta se encontraba sobre el trípode.
El rosarino Lucas Díaz obtuvo un gran resultado en la competencia de Indonesia. En diálogo con Conclusión, aseguró que “es una sensación indescriptible haber representado al país”.
El cadáver de una especia hasta ahora no identificada fue encontrado en las cosas del río Huamaul del país asiático.
Un mono fue maltratado por una familia en Indonesia que lo enjauló en un gallinero y sólo lo alimentaba con leche condensada, por lo que no pudo desarrollarse con normalidad.
El terremoto ocurrió cerca de los países asiáticos, en una de las zonas del planeta en la que se registra mayor actividad sísmica. El hipocentro se originó a 626 kilómetros de profundidad.
Quedó detenido por supuesta negligencia. Varios medios locales informaron que el capitán fue uno de los primeros en saltar al agua, antes de ser socorrido junto a otros pasajeros. Murieron 23 personas tras la explosión.
También hay 17 desaparecidos luego de que la nave se incendiaria en su viaje al norte de Yakarta. Rescataron a 194 personas y según relató una pasajera, "la gente se peleaba por los chalecos salvavidas".