La medida se adoptó tras una denuncia de los fabricantes del original Havanna, quien tomó conocimiento a través de consumidores que, en al menos cuatro comercios de una feria de la ciudad de Iguazú, detectaron la venta de potes de cartón con aparentes características de su producto.
Se trata del grupo Inverlat, cuyos socios son los directivos del Banco Macro y accionistas de marcas como Havanna, Reef, ICSA y Aspro.
El Sindicato de Trabajadores Alfajoreros, Pizzeros y Heladeros (Starpyh) denunció que la empresa Havanna suspendió a los empleados por una semana.
