La propuesta implica que Hamas seguiría en el poder en la Franja de Gaza, donde gobierna desde 2007, y que podría reconstruir sus capacidades militares, además de dejar abierta la puerta a que Israel detenga su ofensiva de manera definitiva y retire sus tropas.
El movimiento chiíta libanés confirmó este lunes la muerte de sus miembros, a medida que se intensifican los enfrentamientos en la zona en medio de la ofensiva israelí en la Franja de Gaza, desencadenada tras los ataques de Hamas del 7 de octubre.
El líder de Hamás, Ismail Haniyeh, reveló haber mantenido una conversación telefónica con el secretario de la Yihad Islámica Palestina, Ziad Nakhaleh, como parte de las negociaciones para un alto al fuego.
Un informe de Unicef señala que al menos 17.000 de ellos fueron separados de sus padres o no están acompañados desde que comenzaron los ataques en tierra palestina. Subrayan que algunos “simplemente, ni si quiera pueden decir como se llaman”.
Miles de personas siguen desaparecidas, y se estima que están enterradas bajo escombros de edificios destruidos por los bombardeos que Israel lanza desde hace casi cuatro meses, informó el ministerio de Salud del Gobierno de Hamas en Gaza.
Varios países donantes anunciaron la suspensión de sus ayudas después de que Israel afirmara que 12 empleados participaron en los ataques de Hamas del 7 de octubre en el sur de la nación israelita.
Una autoridad de la Organización Mundial de la salud dijo que la población “se muere de hambre” y “está al borde del abismo”. Desde Naciones Unidas describieron al territorio como “inhabitable”, con la mitad de sus edificios destruidos.
Los hutíes, parte del llamado "eje de resistencia" antioccidental y antiisraelí formado por grupos y milicias de Medio Oriente apoyados por Irán, hostigan desde hace meses la navegación en el mar Rojo, lo que ha dado lugar a represalias de Estados Unidos y Reino Unido.
La solicitud fue anunciada por el alto cargo de Hamas, Taher al Nunu, quien destacó que se trata de un cese total y no de una tregua temporal.
Es la primera vez que mueren soldados estadounidenses en Medio Oriente desde el inicio de la guerra entre Israel y Hamas en la Franja de Gaza, el 7 de octubre, lo que vuelve a hacer temer una escalada de las tensiones con el conflicto latente entre Israel e Irán.
El ministro de Relaciones Exteriores, Riyad Al-Maliki, dijo que el fallo es un recordatorio importante de que ningún Estado está por encima de la ley, y añadió que debe servir como una llamada de atención para Israel y los actores que "permitieron su arraigada impunidad".
Entre las cuestiones confirmadas por los jueces en este primer análisis, figura que algunas de las acusaciones presentadas contra Israel entran dentro de la Convención sobre Genocidio y que, conforme a dicho tratado, los palestinos tienen derecho a una protección como grupo.