Desde hace meses la Unión Obrera Metalúrgica (UOM) de Rosario viene reclamando por la declaración de la “emergencia metalúrgica” en la Legislatura de Santa Fe, algo que se replica en otros lugares del pais y hoy recibió el apoyo del titular nacional de la UOM, Antonio Caló, que visitó el camping del gremio en Soldini.
Los datos aportados por el Instituto de Investigaciones Económicas de la Fisfe evidencian una retracción en la mayoría de los rubros, especialmente los vinculados al mercado interno. Tras largos meses de mermas, el complejo sojero fue de los pocos que se salvó y registró mayor actividad.
El relevamiento hecho por la UOM, precisa que desde 2015 «se han perdido más de 500 puestos de trabajo titulares en la industria metalmecánica» de la localidad serrana.
El dirigente metalúrgico consideró que «la actividad es la más golpeada y no ha mejorado en nada. No se hasta cuándo las empresas podrán mantener a los trabajadores». Además, se refirió al acuerdo paritario, el paro del 29 de mayo y el escenario electoral.
La firma productora de hornos rotativos ubicada en Granadero Baigorria venía suspendiendo a su personal los días viernes durante marzo. En abril se pretendía extender ese plazo a quince días. Hubo mediación con la UOM en el Ministerio de Trabajo.
