La ONG Safeguards Defenders reveló que en dichas instalaciones no tan solo se ofrecería asesoramiento consular a los nacionales chinos en el extranjero, sino que también se intimidaría y detendría a aquellos nacionales considerados disidentes con el fin de “repatriarlos”.
La ONG de asistencia a los presos políticos contabilizó unas 120 muertes y más de 2.000 detenidos desde el golpe militar, entre ellos la premio Nobel de la Paz, Aung San Suu Kyi.
El automovilista, quien tendría problemas psiquiátricos, salió del rodado por sus propios medios y admitió que intentó sin éxito derribar el portón. El ahora detenido les dijo a los policías que tenía coronavirus y que quería entrar a la embajada.
