Su recuerdo sigue tan o más vigente que nunca. Conclusión estuvo en el bar El Cairo con dos amigos con los que el Negro solía reunirse allí: Ricardo Centurión y Aldo Pedro Poy, quienes dialogaron acerca de su vida, contaron anécdotas y hablaron de sus vivencias compartidas.
La historia literaria gira en torno a la relación de un tío que regresa de la guerra y conoce a su sobrino, un dibujante en potencia que lo toma como héroe en sus creaciones.
Luego de haber publicado varios libros gráficos, la dibujante rosarina lanza ahora “un libro sin dibujos”, donde combina ficción y experiencias personales para homenajear a dos de sus grandes amores: Roma y la ópera.