El mandatario juró ser “leal a la patria y al pueblo” y prometió “trabajar duro en la construcción de un gran país socialista moderno que sea próspero, fuerte, democrático, más civilizado y armonioso».
Qin Gang dijo que su país espera que “la administración estadounidense escuche concienzudamente la voz de los dos pueblos, elimine la ansiedad estratégica sobre la ‘inflación de amenaza’ y abandone la mentalidad de la Guerra Fría”, entre otras cuestiones.
El ministro de Defensa del país asiático, Wei Fenghe, señaló al respecto que su país debe “fortalecer su espíritu de lucha, atreverse a luchar y ser bueno luchando”. Otro funcionario del área se refirió a que la disputa se da en la esfera cibernética, la espacial, la de aguas profundas y la biológica».
