El Sumo Pontífice se expresó de esa forma tras el rezo del Ángelus por la celebración navideña, y pidió "quedar cercanos con nuestros hermanos que sufren por la guerra, la miseria, el hambre y la esclavitud".
El sumo pontífice afirmó que es esencial mantener los esfuerzos para detener los conflictos en curso. "Rezo por la población atormentada de Ucrania y por los pueblos de Palestina e Israel", indicó a la multitud reunida en la plaza de San Pedro.
Con una sonrisa en la cara, el pontífice ratificó a los periodistas que lo esperaban que está "todavía vivo" y en un breve intercambio manifestó su "dolor" por los migrantes muertos en las últimas horas en un naufragio frente a las costas de Grecia.
Fuentes vaticanas informaron que la reacción del sumo pontífice fue mejor de la esperada después de la intervención realizada con anestesia total. Regresará a Casa Santa Marta para mediados o fines de la semana que viene.
El sumo pontífice también condenó el “ataque bárbaro” a un centro comercial de la ciudad ucraniana de Kremenchuk. Pidió "que el Señor abra las vías de dialogo, que los hombres no quieren o no pueden encontrar.
El sumo pontífice lo hizo al encabezar desde el Vaticano el rezo del Regina Caeli, la oración que sustituye al Ángelus durante la época de Pascua. También reclamó que haya “alivio y esperanza a quienes sufren”.
Por otro lado, el Pontífice repudió la trata de personas y aseguró que esta práctica “es una herida infectada por la búsqueda vergonzosa de intereses económicos”.
“Les pido, por favor, que abandonen el camino de la violencia, que siempre es perdedora”, expresó el Papa tras los atentados perpetrados recientemente en Noruega, Afganistán y el Reino Unido.
Tras pronunciar el tradicional Ángelus dominical desde la Plaza de los Héroes de la capital húngara, el Sumo Pontífice convocó este domingo al país "a mantener firmes las raíces, pero sin encerrarse", leído como un reclamo a las autoridades locales considerando las recurrentes citas de Orban a las supuestas "raíces cristianas europeas" de sus políticas conservadoras.
El Pontífice argentino tenía previsto presidir una misa solemne por la Jornada Mundial de los Abuelos y las personas de la tercera edad en la Basílica vaticana.
“Estoy cerca del querido pueblo cubano en estos momentos difíciles, en particular de las familias que más sufren”, expresó Francisco durante el rezo del Ángelus.
“En estos días de hospitalización he experimentado lo importante que es un buen servicio sanitario, accesible a todos, como el que hay en Italia y en otros países. No debemos perder este bien tan precioso ¡Tenemos que mantenerlo!”, exclamó Francisco durante el rezo del Ángelus, que en esta oportunidad fue emitido desde el hospital.