El envío de la iniciativa por parte del Gobierno había sido un compromiso de campaña de Alberto Fernández, quien también ratificó su promesa ante la Asamblea Legislativa, el 1 de marzo de este año, al dar inicio al período de sesiones ordinarias.
El proyecto de Interrupción Legal del embarazo (ILE) sancionado esta madrugada por el Senado de la Nación despenaliza y legaliza el aborto en las primeras 14 semanas de gestación, además de habilitar la objeción de conciencia de los profesionales que no estuviesen de acuerdo con esa práctica.
"Para nosotros cristianos el dar las gracias ha dado nombre al Sacramento más esencial que hay: la Eucaristía. La palabra griega, de hecho, significa precisamente esto: acción de gracias", afirmó el Papa al encabezar su última audiencia general del año.
Por 38 votos a favor, 29 en contra y una abstención, la Interrupción Voluntaria del Embarazo se convirtió en ley y fue girada el Poder Ejecutivo. Además, se aprobó por unanimidad el Plan de los mil días.
La discusión era seguida desde la calle por miles de personas que se juntaron frente al edificio del Congreso, separados por un vallado entre “verdes”, favorables al aborto, y “celestes”, en contra.
La legisladora aclaró que el Ejecutivo Nacional aplicará un veto parcial a la ley, quitando el concepto de “integral” vinculado a la salud, para aquellos que aún están indecisos.
Si bien el tratamiento se estima más corto que en la Cámara baja algunos días atrás, la jornada parlamentaria se extendería por más de diez horas y la votación sería en la madrugada.
La sesión comenzará a las 16. Será a través de videoconferencia y sólo se permitirá a poco más de una docena de legisladores en el recinto.
A través de su cuenta de Twitter, el Santo Padre volvió a manifestar su rechazo a la interrupción voluntaria del embarazo, aunque no se refirió de manera expresa a la Argentina.
El jefe de Estado destacó que existe "una Argentina hipócrita que niega el aborto como antes negaba la homosexualidad" y pidió dar un debate sincero al momento de tratar la ley en el Senado.
La Iglesia honra a estos niños que murieron por orden del rey Herodes, quien quería asesinar a Jesús, el Mesías recién nacido.
El doctor en Ciencia Política y magister en Relaciones internacionales escribió una carta a sus alumnos en la que se preguntó: "¿Hay alguna nueva evidencia científica que contradiga la afirmación de Ramón Carrillo de que cuando una mujer está embarazada en su seno late el corazón de una vida -no un 'fenómeno' como sostiene Ginés Gonzales García- y que el aborto por lógica consecuencia es un asesinato?"