Una increíble sorpresa se llevaron los fans que asistieron a la jornada inaugural del Lollapalooza Argentina en el Hipódromo de San Isidro, Buenos Aires. Es que Chano, quien venía de recuperarse de una internación días antes, reunión a sus ex compañeros de Tan Biónica, quienes tocaron varios temas sobre el escenario.

Como si esto fuese poco, el cantante anunció que el grupo volverá a tocar “próximamente” en un estadio. Luego de la comunicación, como no podía ser de otra manera, los fanáticos saltaron y gritaron de emoción.

Tras una cuenta regresiva de cinco minutos, mientras las pantallas mostraban fotos antiguas del grupo, irrumpió con el hit «Noche mágica», en medio de una lluvia de papel picado. Con la promesa de un inminente recital en un estadio porteño, el grupo echó mano a algunos de sus hits ante un público que se animó con el reencuentro.

Más shows

Entre los puntos salientes de la primera tarde también se anotó el show de Dante Spinetta, acaso gran referente para la nueva generación, quien se dio el gusto de hacer debutar en estas lides a su hija Vida. Ya con la noche instalada, el predio comenzaba a dar señales de los 100 mil tickets vendidos a la espera de Rosalía y Drake.

Cuando comenzaba a caer la tarde, Trueno hizo gala de su gran momento en un set en el que desplegó sus estilizadas rimas y hasta dedicó una buena parte a recordar su pasado de freestyler.

Junto a una orgánica banda de alto vuelo, con vientos, solos de guitarras, coros y teclados se paseó por el neosoul, el hard rock, los ritmos latinos «a lo Santana» y el jazz; Trueno repasó sus grandes éxitos.