Las estrellas de varias de las películas que compiten por la Palma de Oro comenzaron a llegar este domingo a la ceremonia de entrega de premios del festival de Cannes, que pondrá fin al certamen.
Los primeros en llegar fueron el director de cine francés Stéphane Brizé, director del filme «La ley del mercado», acompañado por su protagonista Vincent Lindon.
«Estoy loco de alegría», dijo Lindon ante las cámaras, poco antes de subir la famosa escalinata que conduce a la gran sala Lumière, donde tendrá lugar la entrega de premios.
Poco después llegó sonriente Todd Haynes, el realizador norteamericano de «Carol», la historia de amor lésbico protagonizada por Cate Blanchett y Rooney Mara.
El cineasta mexicano Michel Franco, el único representante latinoamericano en el certamen de este año, con su película «Chronic», una historia de un enfermero que cuida a pacientes terminales, se mostró muy sonriente a la llegada a la ceremonia.
«Estoy feliz de estar aquí», dijo, antes de agregar que había sentido «mucha solidaridad» en el festival, en el que tiene muchas opciones de llevarse alguno de los premios.
Su protagonista Tim Roth confesó por su parte que antes de llegar a Cannes con una película de temática tan sombría «tenía miedo de venir con este filme, pero ahora me divierto».
El suspenso de la premiación permanecía intacto hasta minutos antes de iniciarse la ceremonia, que pondrá fin a un certamen muy disputado sin claros favoritos para llevarse la Palma de Oro.
Los nueve miembros del jurado presidido por los hermanos Joel y Ethan Coen realizaron un cónclave horas antes en algún lugar secreto y sin teléfonos móviles para elegir por mayoría absoluta -al menos 5 votos- a los merecedores de los siete galardones que otorga el festival de Cannes: la Palma de Oro, el gran premio, premio del jurado, mejor dirección, mejor guión y mejor actriz y actor.
Según dijo el propio Joel Coen al pie de la escalinata, el ambiente del festival y las deliberaciones fueron «muy amistosos, de las mejores experiencias de mi vida».
Rossy De Palma, la actriz española musa inspiradora de Pedro Almodóvar y que este año era miembro del jurado, respondío «no tanto» cuando le preguntaron a la entrada si las deliberaciones habían demorado mucho.
«Asumimos nuestras decisiones y nos alegramos por los que ganaron», agregó Rossy De Palma.
