Leonardo Sbaraglia trabajará por primera vez con Pedro Almodóvar en la nueva película del director español Dolor y gloria.

La película reúne los momentos más determinantes de la existencia del realizador, con la presencia de su madre como puntal imprescindible, interepretada por Penélope Cruz en sus años de infancia, juventud y pueblo, y Julieta Serrano, al final, hasta los días de su muerte.

Banderas filmó siete películas con Almodóvar, la primera en 1982 -”Laberinto de pasiones”-, seguida por “Matador”, “La ley del deseo”, “Mujeres al borde de un ataque de nervios», “¡Átame!”, “Los amantes pasajeros” y “La piel que habito”.

Antonio Banderas, quien comenzó su carrera cinematográfica en 1982 con el cineasta Pedro Almodóvar y se convertirá en el «alter ego» del director manchego en su película «Dolor y gloria», aseguró este martes que el nuevo film tiene «algo de psicoanálisis» porque contiene «una búsqueda muy profunda dentro de él».

Banderas dijo que Almodóvar «trata de comunicar cosas muy complicadas a través del cine, que es la única manera que utiliza Pedro para tratar con el mundo y consigo mismo». «Él dice que es su película más autobiográfica, pero todas lo son o tienen algo de eso; esta es aún más íntima», añadió en una entrevista.

A su vez, Almodóvar señaló en la misma nota que es su película “más sincera y personal, casi su vida”, contada desde el momento en el director de cine al que interpreta Banderas, se encuentra en crisis personal, física, emotiva y de recuerdos.

«Esto no es un documental», definió el director, ganador de un Oscar, y aseguró que muchas de las cosas de la película están ahí «para no decepcionar a los periodistas” y a quienes lo ven reflejado.

Y, acotó: «Empecé el guión pensando en mí mismo pero de inmediato la regla de la ficción me llevó por otro camino que no es exactamente el de la realidad, lo cual no quiere decir que sean mentiras, pero no es literal: no soy lo que hace Antonio.»