No es una canción más, es un himno por la paz que trascendió las fronteras de los países y los idiomas. «Sólo le pido a Dios», el tema que compuso León Gieco en 1978 no ha perdido vigencia.

Y más desde el 7 de octubre último cuando Hamas atacó Israel y la posterior represalia en la Franja de Gaza que ha dejado alrededor de veinte muertos, varios miles más de heridos y la sensación de que la paz en Medio Oriente es una utopía.

No para Gieco, ni para el grupo de música árabe Alma Sufi Ensamble ni para el cantante Gastón Saied, de la comunidad judía. Desde el lugar de la cultura popular hicieron su aporte grabando una versión en tres lenguas: español, hebreo y árabe de la mítica canción de León.

«Es una manera de sentirnos menos impotentes al ver los horrores de la guerra», reflexionó Gieco en el video grabado semanas atrás en la Tekkia Sufí, el templo islámico ubicado en el barrio porteño de Colegiales.

A su vez Nuri Nardelli, la vocalista de la Alma Sufí, agregó que «esta canción de León es atemporal y, lamentablemente, tal vez nunca podremos de dejar de cantarla; pero lo importante es que cada vez que la hagamos, sea con el corazón. Y hacerla en este lugar, la redimensiona.

Y Gastón Saied completó: «Elevar una melodía por la paz trasciende algunas barreras físicas. Y en este entrecruzamiento de religiones, el pedido de paz tiene un valor aún mayor. Sabemos que esto no va a cambiar absolutamente nada, porque la guerra habla otro idioma. Pero cantar esta canción por la paz en hebreo, árabe y castellano, tiene una razón de ser: pedir por la paz en Medio Oriente”.

Tres voces (León, Nuri y Gastón) para cantar en tres idiomas (castellano, árabe y hebreo) por la paz (salaam y shalom).