Fotos: Guido Adler- @fitopaezmusica

Fito Páez brindó en la noche del domingo su primer concierto en vivo por streaming junto a la totalidad de su banda, desde el porteño estadio Movistar Arena, en una presentación en la que la ausencia del calor que suele aportar el público fue sorteada con éxito a través de una performance que sobresalió por la extrema prolijidad en cada interpretación.

Aunque la excusa del show era la presentación del disco “La conquista del espacio”, lanzado en marzo de este año, que cuenta con tres nominaciones para la 21º edición de los Grammy Latinos, del próximo 19 de noviembre; el músico rosarino apenas repasó cuatro composiciones de esa placa y prefirió concentrarse en su tradicional repertorio, confeccionado con los hits cosechados a lo largo de su trayectoria.

El concierto también se destacó por la impactante puesta en escena, con gráficas alusivas en cada canción y juegos de luces que sumaron al gran nivel que tuvo el espectáculo.

En este contexto, una totalidad de 17 canciones se fueron sucediendo y creando distintos climas a lo largo de poco más de una hora y media de show. De la excelencia musical alcanzada, sin dudas, también fueron responsables los integrantes de la banda que acompaña al rosarino, quienes dan claras muestras de su largo rodaje.

 

La corista Florencia Villagra aparece como la figura novedosa en una formación que presenta a Diego Olivero, en bajo; Gastón Baremberg, en batería; Juan Absatz, en teclados; y Juani Agüero, en guitarras.

Fito Páez abrió el fuego con el tema que le da nombre a su última placa, echó una mirada hacia su anterior producción de 2017, “La ciudad liberada”, a través de la exitosa “Tu vida, mi vida”; para luego volver a su más reciente trabajo con la rockera “Las cosas que me hacen bien”, una suerte de versión actualizada de “El diablo de tu corazón”.

Pero aunque este inicio parecía dar cuenta de un repaso por su último trabajo, la sucesión de clásicos como “11 y 6”, “Naturaleza sangre”, “Al lado del camino” y “Fue amor”, con especial dedicatoria a Fabiana Cantilo, marcaron el carácter de esta presentación.

Si bien es cierto que el artista intercaló dos flamantes composiciones, como las bellas “Maelström” y “La canción de las bestias” –candidata a alzarse con un Grammy a la mejor canción pop/rock-; a partir de allí desfilaron diversos clásicos en su obra.

“El amor después del amor” fue la oportunidad para que se luciera Florencia Villagra en los coros, quien a pesar de mostrarse aún un tanto contenida, demostró un enorme potencial que finalmente afloró al momento de “Brillante sobre el mic”.

 

En “Yo vengo a ofrecer mi corazón”, Nathy Peluso apareció como la única invitada del show, quien al asumir la voz principal y coronar su interpretación con una especie de baile tribal, convirtió su aporte en un cover propio de esta popular canción.

“Circo beat” y la mencionada “Brillante sobre el mic” dieron la señal de que el concierto estaba llegando a su momento culminante, sobre todo ante el pedido del propio artista para que el público virtual encendiera las luces de sus celulares, como siempre ocurre en sus presentaciones con esa composición.

“Esta canción termina resignificándose con tantos años. No sé si me gusta que pase eso. Sucede simplemente”, dijo el rosarino, antes de emprender la furiosa “Ciudad de pobres corazones”, la sangrienta postal social escrita en 1986, luego del resonado asesinato de su abuela y su tía.

“Muchas gracias a los enfermeros y enfermeras, a los médicos, a los que están en la primera línea. Los que ayudan en este momento”, expresó Fito, al término de “Dar es dar” y antes del final definitivo con “Mariposa technicolor”.

La próxima parada para el músico será su actuación en la gala de los premios Grammy, cuya ceremonia central será en Miami, pero contará con shows en vivo desde escenarios de distintos países.

Ahora resta que todas las canciones de “La conquista del espacio” suenen en vivo. La calidad del disco y lo mostrado hoy en vivo auguran un futuro concierto de nivel excepcional.