Falleció el artista plástico rosarino Raúl “Negro” Gómez
Después de haber tenido un accidente con su moto aproximadamente a las 13, fue internado en el Heca debido a las múltiples lesiones que tenía en sus piernas y en su cabeza. Comenzó su prolífica obra dibujando comics hasta lograr su estilo original y descomedido.
El artista plástico rosarino Raúl “Negro” Gómez falleció este domingo a las 19 en el Hospital de Emergencias Clemente Álvarez (Heca), después de haber protagonizado un accidente a bordo de su moto en inmediaciones de la intersección de las calles Pacheco y Sorrento de la zona norte de Rosario.
Según testigos del lugar, aproximadamente a las 13 Gómez conducía su rodado hasta que el mismo empezó a tambalearse, situación que le hizo perder control e impactar en una camioneta que estaba estacionada en la calle.
Tras sufrir golpes en varias partes de su cuerpo, cuyas zonas más comprometidas fueron las piernas y la cabeza según las primeras estimaciones, un móvil del Sies llegó al lugar y luego lo trasladó al HECA.
La prolífica obra del artista comenzó a tomar estado público cuando en los primeros años de la década del 80 publicó comics en publicaciones extranjeras, como Animal de Brasil, además de las nacionales y locales como Página 12, Risario y Fierro.
El Negro Gómez estudió en la Facultad de Bellas Artes de Rosario y su producción se caracterizó la variedad y calidad de trabajos que transitaron desde expresiones neo figurativas hasta incursionar en la abstracción.
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Según el profesor y licenciado en artes visuales, Arnoldo Gualino, el trabajo del Negro “indaga en las problemáticas terrenales, crea fondos fantasiosos, indefinidos, misteriosos y profundos; velado con humos y nubes, por lo que obtiene una unidad compositiva y expresiva de resultante plástica curiosa al observador”.
Hace pocos días, su mirada de artista plástico fue puesta en palabras cuando publicó en sus redes: “La esperanza y el horizonte motivan casi lo mismo: cierta necesidad de dar el primer paso o quedarte contemplando”.
A sus 58 años decidió dar ese primer paso hacia el tiempo y el lugar que lo convierten en parte de la historia de Rosario, donde deja su obra como legado eterno en el mundo del arte.