Por Santiago Fraga
“Estamos inquietos, estamos sedientos y con ganas de hacer mucho más”; así, inagotable es la energía de Bulldog, la misma que demuestran cada vez que se suben al escenario y en cada una de las producciones que realizan a lo largo de estos 25 años. Este sábado, el Teatro Vorterix será testigo de un hecho histórico para el lugar, ya que por primera vez se transmitirá un recital en directo por vorterix.com fuera de Capital Federal.
Junto con otra banda de la camada noventera del punk argentino como lo es Cadena Perpetua, el conjunto rosarino llevará a cabo este show en donde “navegan por los mares” de sus discos, con fidelidad a su estilo de siempre de hacer “lo que se les cante”.
Conclusión dialogó en la previa con Hernán Mantoiani, más conocido como Mantu, voz y guitarra de la formación, que expresó todas las sensaciones que les genera esta oportunidad para el rock rosarino, además de opinar sobre el momento de la banda, la escena punk en la ciudad, todo lo que viene y todo lo que dejó la gira por los 25 años.
Las puertas del show abrirán a las 20, con una pantalla en donde se proyectará el partido de Argentina y Venezuela, comenzando la presentación de Cadena Perpetua las 22.15 y Bulldog 23.45, transmitido en directo vía streaming a través de vorterix.com y por la radio, a través de la emisora de Vorterix.
—¿Qué sienten al volver a tocar con la gente de Cadena Perpetua?
—Nosotros con los chicos de Cadena nos conocemos hace mucho tiempo, hemos hecho giras juntos hace mucho tiempo también, tenemos una buena relación de amistad y hacía como 10 años que no tocábamos juntos, pero por una cuestión de que no nos cruzábamos. Cuando cada uno va teniendo sus rutas por ahí no nos podemos cruzar. Entonces lo que hicimos fue hacer dos fechas, que fueron los dos auditorios de Buenos Aires; se llenaron las dos, quedó gente afuera, hicimos dos más, dos Capital también, y siempre dijimos “Qué mejor para nosotros que traerlos a nuestra ciudad”, y entonces dijimos “Vamos, hagamos esto juntos que hace mucho que no lo hacemos” y aparte de todo con el extra de que va a salir filmado en vivo y en directo por 
vorterix.com, lo cual es un logro excelente porque es la primera vez que se transmite algo de afuera de Capital. En Rosario es la primera vez que se transmite en vivo desde el Vorterix de acá. Traen toda su parafernalia de Buenos Aires, también con Dani Giménez, un periodista de rock muy bueno, y todo eso para transmitir el show en vivo. Es una noche muy especial para nosotros, y volver a nuestra ciudad con nuestros afectos siempre es lindísimo.
—Esta transmisión en directo llega en un momento donde, con el Internet y los nuevos medios, últimamente los artistas reciben más ingresos por los recitales que por sus discos. ¿Ustedes lo pensaron en alguna manera o sobrepusieron lo económico? ¿A raíz de qué surge la idea?
—No lo pensamos del lado económico. A lo mejor después de 25 años tendríamos que empezar a hacerlo (risas). Sería un buen camino. Pero no, lo pensamos como traer y sumar un punto más, como un montón que creo que hicimos, en pos de Rosario, de la cultura del rock de acá. Traer que sea la primera vez que se filma afuera de Capital. Lo vemos de esa manera. También, sí, lo vemos como que son los medios con los que hay que amigarse, ¿no? Que es Internet, que es donde viaja muchísimo más rápido la música. Siempre cuento una anécdota de cuando fuimos por primera vez a México, hace unos seis años, llegamos y había una bandera de Bulldog en el aeropuerto. Yo decía “¿Qué vienen, ‘los Bulldog’ jugadores de básquet?”, y no, era para nosotros. Porque la música viaja rápido, y tenían todos los discos (vía internet, bajados), y es increíble. Entonces también hay que amigarse con todo eso. Es un poco de difusión y de dar a conocer tu música ante un montón de gente que sino por ahí no lo podrías llegar a hacer.
—¿Qué vamos a ver musicalmente en el reci?
—Hacemos de todo un poco. No estamos presentando nada especialmente, entonces lo que hacemos es navegar un poco por los mares de todos nuestros discos, por decírtelo de una manera poética. Vamos a poner de la primera época, del disco Circo Calesita todos los clásicos, así que hacemos un pantallazo general. A la gente le gusta mucho. No son muchas las veces que tocamos acá, por ahí unas dos veces por año, entonces también un poco por eso es que hacemos todo ese collage de canciones.
—Viéndolo desde todos sus años de trayectoria, ¿cómo sentís que está la escena punk en Rosario hoy día?
—Vemos que hay movida de shows, de cosas acá. No sé si la escena nacional ha quedado ya ahí en los que quedamos históricamente, como que no tengo mucho oído nuevo de alguna banda que salió después de la camada nuestra. Sin pecar de malo eh, pero no lo recuerdo exactamente ahora. A lo mejor seguimos hablando y te digo “Ah, tal banda”, pero como que veo que después de la camada de Flema, Cadena, Sin Ley, Bulldog, y todas esas que salieron y que después están las otras más grandes, es como que está quieto en el sentido de aparecer gente nueva. Pero también creo que está vivo, que sigue estando. Acá en Rosario hay un montón de shows y siempre hay bandas que tocan de invitadas previo a estilo hardcore o punk hardcore. Hay muchas. Yo creo que está bueno que siga estando porque es un género que atrae a mucha gente joven, adolescente, rebelde, con ganas de quejarse de algo.
—¿Se podría decir entonces que lo novedoso son las formas más que los artistas? Porque los jóvenes que vos decís de hoy en día todavía siguen escuchando Bulldog, Sin Ley, Attaque 77…
—Creo que sí. Igual también creo que es parte de lo que cada uno hizo en su camino. Nosotros creo que fuimos y seguimos siendo muy coherentes en nuestro ideal, en lo que siempre quisimos; nunca nos casamos con nadie, siempre fuimos por nuestro caminito, por la colectora, haciendo lo nuestra, sin pedir mucho, sin ser una banda masiva popularmente, ni difundida popularmente; pero para mostrar que hay otros caminos, somos un grupo que anualmente hace giras por Argentina, por Latinoamérica, por España. Entonces hay un montón de cosas que se pueden hacer de la manera nuestra, que a lo mejor no es la manera más vista popularmente o masivamente, pero es la que elegimos, la que nos gusta, y no conocemos otra.
—Plantándonos en el hoy, viendo los 25 años que pasaron atrás, ¿qué esperan del futuro? ¿Sienten que les falta alcanzar algo?
—Siempre sentimos que algo nos falta por hacer, por conquistar, algunas ideas nuevas, sacar una mejor canción, hacer una mejor letra. Pensamos por suerte eso y seguimos teniendo la energía como para pensar eso, que no quiere decir que lo que estamos haciendo y obteniendo y trabajando en el mismo momento que se está creando, el paso a paso, el día a día, no lo estemos disfrutando. Sí lo disfrutamos y muchísimo, pero a su vez también por suerte tenemos las ganas como cuando empezamos de decir “Y vamos otra vez”, “vamos a tocar”, si hay algún fin de semana libre “¿Qué pasa que acá no hay show?”, y “vayamos a conquistar otros pueblos”, a ver qué pasa, y si vamos a México agrandar cada vez más la cantidad de ciudades allá, o en Perú, o en Colombia, cualquiera de esos tres. O sea, estamos inquietos, estamos sedientos y con ganas de hacer mucho más. Hasta estamos trabajando en un disco nuevo que ya tenemos diez canciones para el primer demo. Nosotros siempre trabajamos haciendo diez canciones para un demo y después hacemos más o menos diez más en otro y empezamos a limpiar. O sea que ya empezamos también un proceso de creación que es bárbaro, y estamos en movimiento siempre.
—Respecto de este nuevo material que mencionás, en cuanto a estilo: ¿se asemeja a lo que venía siendo lo último? Porque siempre cuando se cumple una cantidad conmemorativa de años las bandas suelen lanzar algo como volviendo a las raíces
—Creo que nosotros siempre seguimos las raíces, desde nuestro primer disco hasta ahora. ¿La raíz cuál era? Hacer lo que se nos canta. Esa era la raíz. Y mirá, en el primer disco pusimos un saxo, percusión… de todo, en el primero. Después se fueron metiendo y mechando. Yo creo que cada disco y cada momento de la salida de ese disco son momentos particulares de lo que está pasando la banda en ese momento. Por algo en una edad que era cierta la composición, cierta las letras, en otro momento fue otro. Yo creo que es una normal evolución. ¿Alguna vez dijimos “direccionemos un disco para acá o para allá”? No. las canciones iban naciendo e íbamos haciéndolas, las grabábamos, y sin pensar mucho. “Este disco si lo queremos llevar a la radio y a las radios de Estados Unidos debemos hacerlo más pop”…. ¡Fuck you! Jamás pensamos nada de eso. Siempre fuimos de hacer lo que teníamos ganas, lo que nos iba saliendo, y somos particularmente creyentes de que cada disco es un momento de la banda.
—¿Qué les dejó la gira por los 25 años?
—Arrancamos en el Anfiteatro de Rosario en diciembre de 2014 y después durante el año pasado hicimos de todo. Al principio metimos la Argentina, Colombia, México. La verdad que por suerte seguimos moviéndonos y hay gente interesada en que vayamos a los pueblos, a las ciudades, a las grandes capitales, porque sino sería imposible. Vos podés tener ganas de salir a tocar, pero vos tenés un costo, tenés gente que pagarle, esa gente tiene sus familias que no puede decir “Bueno, me voy 20 días y vuelvo sin plata”. Nosotros entonces nos sentimos también como que esas cosas hay que hacerlas, y siempre hay gente interesada en producir un show de Bulldog en un montón de ciudades de la Argentina. Entonces eso es lo que nos mantiene bien y contentos. Así que seguimos en movimiento.
Foto: Emiliano Canelas
