Por Ariana Robles

Jueves a la noche. Teatro. Eran las 21.30 y el Auditorio Fundación todavía seguía  con las luces prendidas. Banderas de Santa Fe, Rafaela y algún que otro cartel rosarino decoraban las tribunas.

“Escuchelo escuchelo escuchelo, la aplanadora del rock and roll es Divididos la p… que lo parió”, era el canto previo que prometía una noche a puro rock.

dsc_0045-copiaA las 22, el trío más power del país -Ricardo Mollo, Diego Arnedo y Catriel Ciavarella- finalmente hizo su aparición sobre el escenario.

“El fantasio” fue lo primero que se escuchó ni bien se corrió el telón, en clara muestra de lo que vendría después. Es que entre tanto power, Divididos acomodó la lista para ofrecer un recital marcado por canciones que se ensamblaron alrededor de sus temas más conocidos, para brindar un gran show.

Mollo saludó al público rosarino y continuó con una seguidilla de canciones.  “Un alegre en este invierno”, “Vida de topos” y “Tanto anteojo” no hicieron más que empezar a profundizar los sentimientos de admiración para este verdadero dream team que completan Arnedo y Ciavarella, y que siguió con «Sopa de tortuga» y  «Salir a comprar».

De esta manera, y ya desde el inicio del recital, la banda dejaba bien en claro que no estaba en sus planes defraudar a la multitud de fanáticos que se había acercado al teatro, desafiando a una noche calurosa en una noche innovadora para quienes todavía no los habían visto en este formato.

Por eso, continuó reviviendo viejos clásicos como “Sábado”, “Elefantes en Europa”, “Dame un limón” y “Brillo triste de un canchero” para dar paso al set folclórico de la noche con “La amanecida” y “La flor azul” (con violín, bombo y guitarra criolla) y seducir con “Spaghetti del rock” y “Par mil”, de los más coreados, ya con un público fuera de sí.

Durante el show, la potencia arrasadora que caracteriza al trío se hizo sentir en todo momento, como cuando se llevaron puestos a todos de la mano de “Perro funk”, “Ay que Dios boludo” y “Gol de mujer”.

Tampoco faltaron los shows individuales: Mollo mostrando que no precisa de púas para sacarle los mejores sonidos a su guitarra. Arnedo y sus solos de bajo, aplaudidos y ovacionados en «Salir a asustar», «Que tal?» y «Azulejo», y Catriel y su potencia, mostrando siempre su mejor versión.

Sobre el final, “Amapola del 66”, cerraba casi tres horas de show. «¿Quieren otra?», preguntó Mollo al público y nadie dudó en decir que sí. El final llegó con el – siempre reclamado por los fanáticos- popurrí de temas de “Sumo”: “La rubia tarada”, “Crua-Chan” y “Nextweek”.

Ahora sí, la Aplanadora del Rock se despidió de un show impresionante en donde no importó el calor.

Con cada presentación de Divididos, queda claro porque nadie debería dudar entre ir  a sus recitales o quedarse en casa. Los años pasan, pero la vigencia de Mollo y compañía sigue intacta. Una base contundente, tan precisa como prolija, de quienes ya llevan casi tres décadas arriba del escenario, dejan en claro porque ya no es novedad que suenen con una prolijidad y contundencia perfecta.

Con una puesta en escena totalmente distinta a la habitual, pero exitosa, y con la propuesta de una noche diferente, Divididos demostró por qué pasan los años y sigue enamorando a jóvenes y grandes, manteniéndose en un nivel que no deja de sorprender. Dentro de dos días, volverán a reafirmarlo en el Anfiteatro Municipal, cuando miles de fanáticos vuelvan a disfrutar de la magia de su rock.

Lista de temas:

El Fantasio; Un alegre en este infierno; Vida de topos; Tanto anteojo; Sopa de tortuga; Salir a comprar; Perro funk; Sábado; Elefantes en Europa; La amanecida; La flor azul; Dame un limón; Brillo triste de un canchero; Spaghetti del rock; Par mil; Sisters; Senderos; Jujuy; Cristoforo Cacarnu; Indio deja el mezcal; Ay que Dios boludo; Gol de mujer; Salir a asustar; Que tal?; Azulejo;La rubia tarada; Amapola del 66; Ala delta; Crua chan; Next week.

Galería de fotos, por Santiago Fraga: