Cuando la lucha es el canto
Con un alto contenido social y canciones de compromiso la octava luna de Cosquín fue una conjunción de grandes artistas. La plaza estuvo a medias en convocatoria, sin embargo, la postal fue de excelencia. Inti Illimani y Bruno Arias los destacados de la noche.
Por Diego Montejo (enviado especial)
Defender un mensaje desde el cuero, comprender las necesidades de quienes están postergados es uno de los lemas a que Bruno Arias se remonta cada vez que llega a un escenario. La octava luna del festival de Cosquín no fue la excepción para el jujeño, en una presentación con invitados de lujo como Jorge Giuliano quien fuera guitarrista de Mercedes Sosa, los santafesinos del cuarteto Karé, la coplera Cirila Taritolay de San Antonio de los Cobres, el tucumano Mono Villafañe y el chaqueño German Kalber, Arias remarcó su compromiso social en cada paso de su actuación. Sobre el final, cantó su canción homenaje a Marta Juana González, docente desaparecida en la última dictadura militar. Al final de dicha canción Bruno hizo mención al 24 de marzo para que sea feriado inamovible.
El Chango Spasiuk fue el encargado de la apertura de la octava luna, con la finura musical que lo caracteriza el misionero sobresalió en una plaza preparada para escuchar buena música. Arrancó su actuación con un set de temas enganchados: Acento Misionero, Tarefero de mi Pago y Allá en el Yerbal. Prosiguió con Suite del Nordeste, tema de su autoría, Viejo Caballo Alazán, La Ponzoña, Tierra colorada e Ivanco para el bis.
Inti Illimani llego a Cosquín por primera vez, el grupo chileno, referente de la música latinoamericana, emocionó a gran parte de la plaza con homenaje a Victor Jara de la mano de Bruno Arias. Los temas seleccionados para el repertorio fueron: Señora Chichera, Malagueña, La Calle de la Desilusión, Arriba quemando el Sol, El Tinku, El Aparecido, Tu no te rías y Sobre tu Playa entre otros.
Una de las actuaciones más destacada fue la del riojano radicado en Córdoba Ramiro González. Entre el reclamo por la ley de bosques y apoyando la marcha en repudio al desmonte que se llevó adelante en Cosquín por la tarde, Ramiro invitó a La Bruja Salguero y Pancho Cabral para rendirle un homenaje al padre de La Bruja don Tino Salguero. Posteriormente, subió al escenario Atahualpa Yupanqui, Monchi Navarro, músico y director de la orquesta infanto juvenil folclórica del barrio Virgen del Valle de la Capital riojana, proyecto inclusivo e independiente que ayuda a niños vulnerables a encontrar una mejor vida a través de la música. La plaza lo aplaudió de pie a los niños musicos, fue uno de los momentos más emocionantes de la noche.
Se destacó también el Dúo Coplanacu con su clásico repertorio santiagueño. Fueron programados además el Dúo Huaucke, la delegación de la provincia de Rio Negro, Juan Iñaki, Che Joven y Pachi Herrera. Entrada la madrugada hubo cacharpaya de la mano del Duende Garnica, Daniela Heredia, Franco Orozco y Raza y Barro.
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