Este lunes se cumplen 14 años de la muerte del escritor, humorista y dibujante rosarino Roberto Fontanarrosa, ícono cultural de la ciudad y del país, poseedor de un nivel de ironía y humor ácido con el que retrató como pocos el modo de ser y la cultura popular argentina, a través de sus cuentos y de sus personajes como Boogie, el aceitoso, Inodoro Pereyra o Mendieta que reivindican su entrega al trabajo, así como su sencillez y generosidad.

«Nunca dejó de ser un sencillo muchacho de Rosario que no se tomaba en serio, y que creaba sus historias a partir del ojo y el oído atento: de los diálogos que escuchaba de casualidad en la famosa Mesa de los Galanes que compartía con sus amigos en el bar El Cairo», recordó en ocasión del décimo aniversario de la fecha trágica Daniel Divinsky, quien editó su obra por 40 años en Ediciones De la Flor.

«Lo conocí por un artículo en la Revista política «Desacuerdo» -una publicación de izquierda, aunque él era independiente-. Lo que escribió me sorprendió por la combinación de lo sintético y agresivo y de un humor verbal prodigioso», continuó Divinsky, que editó más de 70 obras del humorista, entre libros de historieta como «Boogie, el aceitoso» e «Inodoro Pereyra», y las tres novelas «Best Seller», «El área 18» y «La gansada».

«Trabajaba como un burócrata, porque se imponía un horario para escribir y dibujar, y la creatividad era una yapa. Quino admiraba cómo dibujaba las manos, porque a él nunca le salieron bien», contó a Télam el editor sobre Fontanarrosa, nacido el 26 de noviembre de 1944.

Su carrera se inició en revistas de Rosario como «Boom», «Zoom», «Deporte 70» o «Risario», trascendería luego a nivel nacional por la originalidad de sus dibujos y la rapidez con que los ejecutaba, de ahí que su producción gráfica fuera tan prolífica o abundante, con sus primeros grandes pasos a nivel nacional en revistas como Hortensia o Satiricón y el diario Clarín.

Sería desde esos medios en donde tomarían gran popularidad sus personajes como «Boogie, el aceitoso» -que llegó a publicaciones de Colombia y México-, y el gaucho Inodoro Pereyra, siempre unido a su perro Mendieta.

Hincha de Rosario Central y fanático del fútbol, también es hartamente conocido por la cantidad de obras escritas con el deporte como temática, como el cuento «19 de diciembre de 1971», en el que relata una historia alrededor de la victoria de Central sobre Newell’s en la semifinal de un torneo Nacional (el día de “La palomita de Poy”), «El ocho era Moacyr» o las historias sobre «La hermana Rosa», una mentalista excéntrica protagonista de historias relacionadas a los eventos en los que jugaba la Selección Nacional.

Entre sus libros de cuentos se destacan «El mundo ha vivido equivocado», «No sé si he sido claro», «Nada del otro mundo», «El mayor de mis defectos» y «Uno nunca sabe», entre muchos otros.

«Lo echo de menos como amigo, lo era fundamentalmente. pero además nadie escribe ni dibuja como él después de su muerte», destacó en su momento Divinsky.

Dos años antes de su muerte y en el Congreso de la Lengua que se realizó en Rosario, su defensa de las «malas palabras» -presentes en buena parte de su obra- sorprendió a los presentes en una disertación donde solicitaba «una amnistía» para esos vocablos. Allí quedaron marcadas a fuego sus dotes de irreverente y provocador.

Una vida de película

Con él o sobre él, ya sea en calidad de autor, de guionista, de intérprete o de homenajeado, Roberto Fontanarrosa cuenta con varias películas en las que se puede ver su vida o su obra, estando muchas de ellas disponibles en Internet o en plataformas digitales.

Desde enero del 2020, se encuentra disponible en Youtube el documental «Cine Negro», dirigido por Mariana Wenger, que con una duración de 67 minutos hilvana, en forma de historieta y sketchs, testimonios de colegas, actores, amigos y familiares del dibujante.

La plataforma de Amazon, Prime Video, ofrece el documental de 2008 “Fontanarrosa. Vida, Pasión y Humor”, dirigido por Matías Gueilburt, repasando vida y obra a través de familiares y amigos; y la película animada 3D argentina-mexicana «Boggie, el aceitoso» (2009), basada en su personaje y dirigida por Gustavo Cova.

Por su parte, en Netflix se puede ver “Metegol”, la popular película animada de Juan José Campanella, inspirada en el cuento «Memorias de un wing derecho», de Fontanarrosa.

En Youtube se puede encontrar también completa la película «Cuestión de principios» (2009), dirigida por Rodrigo Grande y con un guión coescrito por Fontanarrosa, basado en su cuento de igual título.

Además, en la red social de videos también se encuentran subidos los distintos capítulos de «Los Cuentos de Fontanarrosa», un ciclo de unitarios emitidos por Canal 7 en 2007, que consta de 33 episodios en donde reconocidos actores argentinos adaptan a la pantalla chica varios de sus cuentos. También se encuentran “Martín Fierro. La Película Animada” (2007) con co-guión y diseño de Fontanarrosa, dirigida por Liliana Romero y Norman Ruiz; “Bola 8” (2013), cortometraje de Mario Bertazzo, inspirado en el cuento del ‘Negro’ titulardo «Sardina»; y “¿De quién es el portaligas?” (2007), la famosa película de Fito Páez en la que Fontanarrosa aparece como actor.

 

En la plataforma Cine.ar, actualmente hay dos películas que no son sobre él, pero en las que participa en calidad de entrevistado: «Puerta 12» y «Fútbol Violencia SA».

Una de las producciones más recientes sobre el ‘Negro’ es la película de Gustavo Postiglione «Fontanarrosa. Lo que se dice un ídolo» (2017), que consta de la adaptación de seis historias escritas por el artista rosarino. Lamentablemente, en este momento no se encuentra en ninguna plataforma, pero espacios como Cine.ar o el sitio web de El Cairo la han tenido publicada y aún suele emitirse por la Televisión Pública o 5RTV.